Arnaitz GORRITI
BALONCESTO

La victoria en la cancha del Alba Berlín tapa la irregularidad del juego

Los gasteiztarras rompieron virtualmente el partido en el tercer cuarto con un parcial de 14-25, pero debieron sufrir para imponerse sin Howard.

Codi Miller-McIntyre le dio puntos y entereza defensiva en los minutos finales al Baskonia.
Codi Miller-McIntyre le dio puntos y entereza defensiva en los minutos finales al Baskonia. (EUROLEAGUE)

A pesar de las muchas imperfecciones del juego de Saski Baskonia, venció en la cancha del Alba Berlín, que es lo que importa. Los gasteiztarras rompían el partido virtualmente en el tercer asalto, fruto de un parcial de 14-25, llegando al último asalto con 61-76. Sin embargo, el cuadro alemán reaccionó y le metió el miedo en el cuerpo en el tramo final, sobre todo cuando los italianos Procida y Spagnolo entraron en erupción.

No obstante, un quinteto compuesto por Codi Miller-McIntyre, Vanja Marinkovic, Tadas Sedekerskis, Chima Moneke y Matt Costello se las apañó para aguantar el tirón y sumar la primera victoria de la presente Euroliga, y hacerlo a domicilio, lo cual siempre tiene una dificultad añadida.

Sigue quedando mucho trabajo por hacer aunque se han visto detalles interesantes sobre todo en el tercer cuarto y cuando el conjunto baskonista metió el factor del físico en su juego, pero después de una victoria los errores se corrigen con menor disgusto.

DEMASIADA LEVEDAD

Ocho de los diez primeros puntos del Baskonia corrieron a cargo de Codi Miller-McIntyre, explotando el puesto de base, sin duda una de las debilidades del cuadro alemán, con jugadores tan inexpertos como Samar y Spagnolo en sus filas.

La renta baskonista nunca fue grande en el inicio, pero siempre fue por delante, en buena medida por la «amabilidad» defensiva del Alba Berlín. Sin embargo, esa misma blandura también hizo que el equipo de Israel González supiera mantenerse a la estela del Baskonia. En un toma y daca de canastas, con Nico Mannion replicando los puntos de Matteo Spagnolo, los de Joan Peñarroya alcanzaban la orilla del final del primer cuarto con un 21-25 a su favor, luego de un triple del base italo-americano para finalizar el período.

Los de Joan Peñarroya se escaparon 22-30 en el inicio del segundo asalto. Con todo, el ala-pívot Tim Schneider se erigió en un elemento sorprendente e indescifrable, de forma que un Baskonia demasiado alegre solo pudo ganar por 47-51 al descanso.

DEL ARREÓN AL SUSTO

Dos triples de Matt Costello y otro de Codi Miller-McIntyre despertaron un parcial de 2-9 para irse 49-60, en el arranque de un tercer cuarto francamente esperanzador.

Esos primeros ataques descubrieron a un Baskonia paciente en la circulación de balón, fruto de que en el descanso no solo hay broncas del entrenador. La mejora en defensa por fin se hizo efectiva, especialmente en un Matt Costello que despertó.

Pero tras el 61-76 del final del tercer cuarto, el Alba Berlín reacciónó. Procida y Spagnolo empujaron al bando local, al punto de ponerse 83-85, ante un Baskonia sin Howard.

Pero con Sedekerskis y Moneke erigidos en líderes en la sombra, los gasteiztarras aguantaron el tirón, logrando amarrar la victoria a domicilio en el Mercedes-Benz Arena.