GARA GAZA
INFIERNO EN GAZA

Israel perpetra otra matanza masiva en el campo de refugiados de Yabalia

En un solo bombardeo Israel provocó decenas de muertos -al menos 145- y centenares de heridos en el campo de refugiados de Yabalia, una matanza que dispara el infierno en que ha convertido Gaza y el «cementerio de niños» que denunció Unicef. A la vez, tropas israelíes combaten cuerpo a cuerpo con milicianos palestinos en un intento de partir la Franja en dos.

Palestinos buscan supervivientes en el cráter del bombardeo sobre el campo de refugiados de Yabalia.
Palestinos buscan supervivientes en el cráter del bombardeo sobre el campo de refugiados de Yabalia. (Fadi AL WHIDI | AFP)

El Ejército israelí supera cada día la brutalidad de sus ataques contra una población palestina asediada por la sed y el hambre y sin un lugar donde refugiarse de los intensos e indiscriminados bombardeos.

Ayer al menos 145 personas murieron en el bombardeo contra el campo de refugiados de Yabalia, en el norte de la Franja de Gaza. El Gobierno gazatí apuntó la cifra de 400 muertos y heridos por la caída de seis bombas de fabricación estadounidense arrojadas contra zonas residenciales.

De hecho, el número de fallecidos podría aumentar, ya que todavía quedaban muchas personas bajo los escombros de los edificios derrumbados. Muchas de las viviendas quedaron reducidas a polvo, ya que el impacto arrastró a las viviendas circundantes.

«Niños pequeños llegaban al hospital con heridas profundas y quemaduras graves, sin sus familias. Muchos gritaban y preguntaban por sus padres», relató un médico de MSF.

El Ejército israelí reconoció la matanza y la justificó al asegurar que acabó con un comandante de Hamas y con túneles subterráneos.

Las inmediaciones del Hospital Indonesio, donde fueron llevados decenas de fallecidos, también han sido objetivo de bombardeos israelíes desde la noche del lunes, y el propio centro sanitario ha sufrido daños materiales debido a explosiones cercanas.

Al igual que en el resto de hospitales de la Franja, todos amenazados por Israel tras acusarlos de ocultar bases de Hamas, en el lugar se alojan muchas familias de desplazados y de pacientes ingresados.

GAZA, CEMENTERIO DE NIÑOS

Esta matanza aumentará las cifras que ayer divulgó Unicef, que denunció que las bombas israelíes han matado 3.747 menores hasta el momento, además de 940 que permanecen desaparecidos bajo los escombros. En algo más de tres semanas ha superado a los 2.985 niños muertos en todos los conflictos armados del mundo durante todo el año pasado.

«Gaza se ha convertido en un cementerio para miles de niños y en un infierno para todos los demás», sostuvo su portavoz, James Elder.

«Nuestros temores más grandes sobre el número de niños asesinados, que pasó de docenas a cientos y finalmente a miles, se hicieron realidad en tan solo quince días. Las cifras son escalofriantes y aumentan significativamente cada día», lamentó Elder. Recordó además que, más allá de las bombas, el acceso al agua y el trauma psicológico se han convertido en amenazas muy graves para los niños. Junto con los ataques israelíes, la deshidratación se ha convertido en el riesgo más inmediato de morir en Gaza.

PARTIR LA FRANJA EN DOS

Sobre las ruinas del territorio palestino, el Ejército israelí avanza desde el viernes con un aumento progresivo de tropas y vehículos blindados, tanques y excavadoras. Según admitieron sus portavoces, entabla «feroces combates cuerpo a cuerpo» con las milicias de la resistencia palestina.

Los tanques israelíes llegaron el lunes por primera vez a las afueras de la ciudad de Gaza, unos 2 kilómetros dentro del territorio palestino, donde atacaron a civiles en su carretera principal.

Las milicias de Hamas señalaron que se enfrentaron a las tropas israelíes en el norte de la Franja, epicentro de las operaciones terrestres israelíes, así como Jan Yunis (sur).

Explicaron que las fuerzas de ocupación llegaron de nuevo a la carretera Salahedin, que cruza la Franja de norte a sur, y que están intentando separar el norte de la Franja de la zona sur, lo que confirmaría el avance desde el norte por la costa y desde el este hacia el interior.

Mientras, en Rafah, toneladas de ayuda siguen acumulándose en el paso fronterizo, en espera de una inspección por parte de Israel, que apenas permite entregar una mínima parte de lo que se necesita, utilizando el hambre como arma de guerra. De hecho, Benjamin Netanyahu argumentó ayer que esta ayuda proporciona al Ejército israelí más margen de maniobra para «alcanzar sus objetivos de guerra».

UN GENOCIDIO DE LIBRO

En este contexto, Craig Mokhiber, director en Nueva York de la Oficina de Derechos Humanos de la ONU que dirige Voker Türk, presentó su dimisión ante el fracaso de Naciones Unidas para parar el «genocidio de libro» que «estamos viendo ante nuestros ojos».

Mokhiber explicó que el organismo recibe «enormes presiones para transigir sus principios humanitarios» y que algunas de sus partes, «incluso al más alto nivel, han agachado vergonzosamente la cabeza con el poder».



Azaroaren 7an mobilizatzera dei egin du Gernika-Palestinak

Urriaren 21ean Donostian 30.000 lagun bildu zituen mobilizazioa babestu zuten sindikatu eta erakunde sozialek adierazi dute herri deialdiari eutsi behar zaiola, eta heldu den asteartean berriro kalera ateratzera animatu dituzte herritarrak.

«Eguerdian hezkuntza zentroetan eta lantegietan eta 19.00etan Euskal Herriko udaletxeen aurrean elkarretaratzeak egitera» deitu dute. Kontzentrazio horiek guztiak honako lelo hauekin egingo dira: “Gazako sarraskia gelditu! Konponbide politikoa orain! Palestinarekin elkartasuna!”. Berehalako su-etena eskatuko dute, eraso guztiak amai daitezela eta zibilen bizia eta segurtasuna bermatu dadila. Halaber, Gazako zerrendaren setioa eta, oro har, Palestinako lurraldearen gaineko mehatxua buka dadila exijituko dute.

Halaber, Gernika-Palestina dinamikak zabalduriko bidetik, “Gazako sarraskia gelditu. Konponbidea eta bakea Palestinarentzat” lelopean, azaroaren 4an Baionan Euskaldunen Plazatik 16.00etan abiatuko den mobilizazioan parte hartzeko deia zabaldu dute Ipar Euskal Herriko hainbat eragilek, 35 herritarrek izenpetu duten manifestu baten bitartez.GARA