Imanol CARRILLO
ATHLETIC

Un gran festín rojiblanco para celebrar las buenas nuevas

Los bilbainos superaron con mucha autoridad al Rayo Vallecano gracias a los tantos de Guruzeta, Espino -en propia puerta-, Iñaki Williams y su hermano pequeño Nico, que pudo festejar con gol su renovación hasta 2027 besando el escudo del club rojiblanco.

Nico Williams, acompañado por su hermano Iñaki, se besa el escudo tras anotar el 4-0 y renovar con el Athletic.
Nico Williams, acompañado por su hermano Iñaki, se besa el escudo tras anotar el 4-0 y renovar con el Athletic. (Aritz LOIOLA | FOKU)

El Athletic está viviendo un gran momento y eso se nota en todos los sentidos. El viernes llegaba la gran noticia de la renovación de Nico Williams hasta 2027, y un día después, el equipo goleó al Rayo.

Si las cosas funcionan, ¿para qué cambiarlas? Eso debió pensar Ernesto Valverde. El técnico utilizó el mismo once que empató en casa del líder de Primera, el Girona (1-1), el pasado lunes. Y eso que Yuri había entrado en la convocatoria tras superar su lesión. En su lugar, Iñigo Lekue mantuvo el puesto en el lateral izquierdo. Bueno, mejor dicho esa era la idea del míster. Sin embargo, en el calentamiento tuvo que hacer un cambio por «problemas musculares» de Vesga. En su lugar entró Herrera.

En el Athletic era más que nunca protagonista, en su caso en el extremo izquierdo, el recién renovado Nico. El pequeño de los Williams intentó hacer daño con su velocidad y desparpajo. El joven jugador intercaló ambas bandas en el primer cuarto de hora de partido. Así, en el minuto 13, Nico centró por la derecha, pero el balón se fue a corner, una jugada muy utilizada por los bilbainos en la primera mitad -contaron con cinco, mientras su rival no botó ninguno-.

De nuevo fue protagonista el menor de los Williams en el 14, momento en el que el colegiado anuló el gol de Guruzeta por fuera de juego de Nico. Eso sí, después de volver al extremo zurdo, y después del cuarto saque de esquina, en el minuto 23 llegó el tanto de Guruzeta, ajustando el balón al palo izquierdo tras pase en profundidad de Oihan Sancet.

LA FIESTA COMPLETA

El Athletic dominaba sin mucho alarde, pero terminó la primera parte con todo a su favor: un gol, 53% de posesión y cinco corners por ninguno de su rival. Solo faltaba cerrar el partido. Y este hecho llegó a los dos minutos de la reanudación tras sufrir un pequeño susto visitante. Un centro de Iñaki Williams lo desvió Espino a gol.

El tercero fue de Iñaki, a quemarropa. El mayor de los Williams parece haber alcanzado el poso necesario en el equipo, pero es que su hermano Nico parece venir pegando aún más fuerte, e hizo el cuarto, con un golazo, para culminar la fiesta de su renovación y, lo que es más importante, la buena trayectoria del equipo.

Incluso Yuri se quiso sumar a la fiesta, volviendo al terreno de juego tras varias semanas fuera por lesión. Nico se quedó con las ganas de una tremenda ovación, porque Valverde decidió mantenerlo hasta el final. Un final feliz para él y para toda la parroquia zuri-gorri.