Osasuna regresó al trabajo el pasado viernes después de las ‘vacaciones’ de Navidad con la vista puesta en el regreso liguero frente a un colista Almería que todavía no sabe lo que es ganar, circunstancia que los rojillos buscarán prolongar hoy en El Sadar (17.00) para alcanzar las 22 unidades antes de cambiar de chip y pensar en la Copa y la Supercopa.

Este domingo Osasuna jugará eliminatoria de Copa en Castellón y la próxima semana, el jueves 11, las semifinales de la Supercopa en Riad ante el Barça, competición inédita en la historia del cuadro navarro. Enero será un mes cargado de partidos que podrían ir a más en caso de éxito rojillo.

De seis a nueve choques. Es el rango al que se enfrenta la plantilla capitaneada por David García. Esos tres partidos, dos de Copa, y la posible final de la Supercopa ante Real Madrid o Atlético, dependerán del grado de acierto que el equipo tenga en el torneo del KO y contra el Barcelona.

Será momento para ver las rotaciones de Jagoba Arrasate, últimamente algo impredecible con sus onces. Osasuna comienza este 2024 con la enfermería prácticamente vacía. Tan solo Johan Mojica está lesionado, por lo que el abanico para encarar el maratón de partidos es amplia.

«Viendo los últimos partidos no estamos para sacar pecho, ni mucho menos. Es un rival que ha mejorado en las últimas jornadas. A nivel defensivo es capaz de mantener la portería a cero, cosa que antes le costaba. Confianza ninguna, tenemos que hacer las cosas bien para poder ganar a un equipo que está mejorando», indicó en la previa Jagoba Arrasate sobre el cuadro que dirige Gaizka Garitano.

«ILUSIONES RENOVADAS»

En el bando contrario, el de hoy en El Sadar es una nueva oportunidad para que el Almería sume tres puntos que le permitan pensar en que la salvación es posible, por muy complicado que lo reflejen unos números con solo cinco de los 54 que se llevan disputados en lo que va de campeonato.

Garitano, que ha recuperado efectivos con el alta médica como el lateral Marc Pubill y el delantero serbio Marezi, ambos faltos de ritmo de competición, acude a Iruñea con la poco probable presencia de Gonzalo Melero, que ha trabajado al margen, así como sin Luis Suárez, pese a que este trabaja con el grupo.

El entrenador de Derio afirmó antes de visitar Iruñea que su equipo entra en el nuevo año «con ilusiones renovadas aunque la situación sea complicada», al estar el conjunto almeriense colista con cinco puntos.

«Hay que aprender de lo hecho anteriormente y potenciar lo mejorado, corrigiendo lo que no. Haber desconectado cuando no ganas viene bien para hacer borrón y cuenta nueva», afirmó en rueda de prensa Garitano, quien ensalzó las virtudes de su rival que, «como los equipos del norte, tiene ese ADN de intensidad».