Pello Otxandiano, candidato a lehendakari por EH Bildu, fue entrevistado ayer en Radio Euskadi, donde defendió que «se está abriendo un nuevo tiempo y Nafarroa e Iruñea son ejemplo». «Se está planteando una ecuación política muy interesante, en la que se excluye a la derecha de la ecuación política y se impone un escenario de colaboración en que la fuerza más votada gobierna», añadió, bien sea el PSN en el conjunto del herrialde o EH Bildu en la capital.

Tras recordar que «el PNV está en la ecuación en Nafarroa», Otxandiano planteó que «ese espacio de colaboración es una forma de política nueva que hay que traer a estos tres territorios, que empiezan ya a ser una excepción»: «Si el PNV fuera la fuerza más votada, debería gobernar, y si es EH Bildu, también debería liderar ese Gobierno». A partir de ahí cabrían diferentes formas de gobierno, apostilló.

«Salimos a ganar y con la vocación de ser primera fuerza. Tenemos vocación de gobierno, no por alcanzar el poder para ostentarlo, sino por ocupar responsabilidades de gobierno para poner a este país en el escenario que se merece. Es bueno que EH Bildu participe en los gobiernos y que se note su impronta en las políticas públicas», fue su primera declaración en esta entrevista, a falta todavía de que Iñigo Urkullu ponga fecha a los comicios.

Incidiendo en ese nuevo tiempo político, el candidato de EH Bildu subrayó que «el guion ha cambiado y hay que ser capaces de atarse a la nueva situación». En este punto se refirió al PSE: «He escuchado a Jesús Eguiguren decir que no puede ser que Pedro Sánchez sea más vasquista que el PSE. Ese contexto de afrontar la plurinacionalidad de forma democrática tiene que aterrizar también aquí». Considera que no es lógico que mientras el ministro de Exteriores español va a Europa a reclamar la oficialidad del euskara, el PSE se sitúe en posiciones que comparó «con las de Vox en Baleares».

En cuanto al PNV, ve claro que «tiene que ser parte de la agenda transformadora a la hora de plantear la gobernabilidad de este país y tiene que ser un PNV abertzale».

OSAKIDETZA, GUGGENHEIM...

Interpelado sobre la crisis de Osakidetza, Pello Otxandiano advirtió de un problema de «falta de planificación» y de otro en la «política de contratación». Consideró que hay que atacar ya las listas de espera y reforzar la Atención Primaria, para después emprender reformas que necesitarán más tiempo porque el modelo actual «falla desde la base».

En cuanto a la industria, señaló que el contexto actual global muestra transformaciones hacia una economía «más circular» y «más redistributiva». Y cree que ello «implica una reconversión de buena parte de nuestro tejido productivo». «Queremos seguir siendo un país industrial, pero hay síntomas preocupantes, hemos pecado de seguir la inercia, una inercia neoliberal, de no intervencionismo, de no protagonismo del sector público...», ahondó.

Esta semana es noticia, además, el anuncio de parón en el proyecto del Guggenheim Urdaibai por parte del PNV. Se declaró «atónito» con lo que está ocurriendo. «Yo no sé cuál es el proyecto, en eso coincido con el lehendakari. ¿Es una infraestructura cultural o económica? ¿Es una infraestructura estratégica? Porque es una inversión muy importante. Y en ese caso, ¿no están las prioridades en otro sitio? Desde el punto de vista del medio ambiente, tampoco me parece que esto se pueda plantear así», apuntó.

Su estupor aumenta, dijo, cuando la diputada general de Bizkaia, Elixabete Etxanobe, hizo campaña en mayo subrayando que el Guggenheim Urdaibai saldría adelante «sí o sí» y ahora admite que «no sabe cuál es el proyecto».

APORTACIÓN GENERACIONAL A LA CONVIVENCIA

El día en que se juzgó en la Audiencia Nacional española el atentado mortal contra el concejal Manuel Zamarreño, Pello Otxandiano fue preguntado también sobre esta cuestión. «Estoy absolutamente persuadido de que nuestra generación tiene que hacer una aportación cualitativa en los siguientes años», respondió.

La situó en dos vectores. Por un lado, «generar las condiciones para que se asuman las responsabilidades políticas de lo que ha sucedido en este país, porque este es el punto de partida para que se avance en garantías de no repetición y de reconocimiento y reparación de las víctimas. Principalmente, las que no se han asumido, que han sido las de la violencia de Estado y la tortura».

Y junto a ello, «tenemos que avanzar en ser capaces todos y todas de empatizar con el dolor de todas las víctimas sin excepción, y creo que EH Bildu participa en ello. En el caso de Manuel Zamarreño, el Ayuntamiento de Errenteria es ejemplar en esto», recordó.