EDITORIALA

Aclararlo todo y depurar responsabilidades

Un joven de 16 años resultó gravemente herido la noche del domingo al lunes en los carnavales de Tolosa, en el transcurso de una carga de la Ertzaintza. La lesión, por la cual tendrá que pasar por el quirófano, se produjo en el ojo, y la familia ha apuntado al impacto de un proyectil de la Ertzaintza. Los sucesos ocurrieron a altas horas de la noche y, según el relato de sus más cercanos, la víctima, que estaba en un ambiente festivo, ni siquiera fue consciente de que previamente se estuviese produciendo una pelea. Corrió porque vio correr a la gente, hasta que recibió el impacto.

En el país de Iñigo Cabacas, leer que, una vez más, una carga de la Ertzaintza ha podido herir gravemente a alguien produce escalofríos. La Policía anunció ayer una investigación, según dio a conocer en una nota de prensa algo confusa en la que apenas se hacía una vaga referencia al herido como consecuencia de su carga, sobre la que tampoco se aclaraba nada. Entre el habitual cierre corporativo y la necesidad de transparencia, los responsables del Departamento deben garantizar que, por una vez, prime la segunda y se rindan cuentas, empezando por aclarar el armamento con el que fue herido el joven. Se supone que la Brigada Móvil ya no utiliza pelotas de goma, aunque según la última información, de 2021, los agentes seguían entrenándose para su utilización, por si se viera su necesidad «como recurso de ‘‘última ratio’’ en incidentes» muy graves. ¿Las utilizaron la madrugada del domingo a lunes en Tolosa? En caso contrario, ¿fue una bala de foam, a priori mucho menos lesiva, la causante de las graves heridas?

Las preguntas que necesitan respuesta no tienen solo que ver con la munición empleada. ¿Por qué se cargó a altas horas de la madrugada en un lugar y un momento tan concurrido como los carnavales de Tolosa? La Ertzaintza explicó que se dieron algunas peleas, pero lo cierto es que del propio parte policial se extrae que el lesionado más grave es el que produjo su intervención. Es primordial que aclaren las circunstancias de lo ocurrido y que de ellas se deriven y se asuman las pertinentes responsabilidades.