A cierre de esta edición, la coalición conservadora Alianza Democrática (AD, conservadores) iba por delante con el 31% de los votos en los comicios de este domingo en Portugal. Los socialistas, que gobernaban hasta la fecha, se quedan con el 28%. La extrema saca más del doble de votos que en 2022.

El Partido Socialista se vio de esta manera sobrepasado y es seguro que perderá el Ejecutivo. El PS gobierna el país desde hace ocho años, pero decidió lanzarse a un adelanto electoral por un caso de corrupción que quedó en nada.

A causa de ese escándalo, dimitió el primer ministro Antonio Costas, dejando al PS sin un líder con tirón.

Como tercera fuerza emerge la ultraderechista Chega, con del 19%. Obtuvo un 7,2% en 2022.

SANTOS CIERRA EL PASO A LA CHEGA

El nuevo líder del PS, Pedro Nunso Santos, dijo que no bloquearía un gobierno del candidato de AD (Luís Montenegro) para tratar de minimizar el poder de la extrema derecha.

Los partidos a la izquierda del PS caen al 3% en el país de la Revolución de los Claveles. Son sus peores datos.

La participación resultó inusualmente alta para ese país, por encima del 60%, en línea con la incertidumbre que vaticinaban las encuestas.

La subida de Chega deja un escenario de pactos complicado tras la investidura, según distintos analistas, a la espera de la conformación final del hemiciclo (que depende en buena medida de las circunscripciones).

El líder de la extrema derecha portuguesa, André Ventura, felicitó a la su formación Chega por «un resultado absolutamente histórico».