En un sprint de potencia, largo y desorganizado, Biniam Girmay, el eritreo que ha puesto a la África negra a soñar con el maillot verde, se confirmó ayer como el sprinter más fuerte de esta edición del Tour, imponiéndose en la meta de Villeneuve sur Lot, en una recta de un kilómetro que picaba hacia arriba, en la que el ciclista del Intermarché fue el más rápido por delante de Wout van Aert, Ackermann y Cavendish, tras la descalificación de Demare, que había sido segundo, por maniobra irregular.

Girmay (Asmara, 24 años) no dio opción alguna en un final en el que, llegando en progresión desde posiciones retrasadas, remontó para alzar los brazos por tercera vez. Ya se estrenó en Turín, confirmó su poder en Colombey y ahora en Villeneuve es ya el sprinter a vigilar vestido con un maillot verde motivador.

Si la etapa tuvo el final, más o menos, esperado, poco tuvo de transición la duodécima jornada, disputada entre Aurillac y Villeneuve-Sur-Lot, de 203.6 kilómetros, pues dejó tres grandes perjudicados.

Pello Bilbao y Jacobsen se tuvieron que retirar con problemas físicos y Primoz Roglic, una vez más, se vio envuelto en una caída a 12 kilómetros de la línea de llegada, con lo que tanto Joao Almeyda como Carlos Rodríguez le adelantadron en la general y el esveno de Bora es ahora sexto.

PELLO NO PUDO MAS

Muy pronto comenzó el calvario de Pello Bilbao. El de Gernika, débil, enfermo, enseguida se retrasó. No era el ciclista combativo que ganó el año pasado en Issoire y finalizó sexto en la general. Un virus, ya se habla del Covid, parece que anda suelto por el Tour, y está afectando a varios corredores. Pello nunca había abandonado en 5 participaciones en la ronda gala.

Tampoco aguantó la etapa el excampeón de Europa neerlandés Fabio Jakobsen, ganador de etapa en el Tour y quíntuple en la Vuelta. Un sprinter menos para las llegadas masivas. Mientras unos se subían al coche para volver a casa, la carrera seguía animada.

El festival de ataques iniciales terminó con la luz verde del pelotón para la fuga de Madouas, Pacher (Groupama-FDJ), Abrahamsen (Uno-X), otra vez, y Turgis (TotalEnergies), quienes pasaron la Cota d'Autoire en el km 62 con 3 minutos de adelanto sobre un pelotón que controlaba el Movistar de Gaviria y el Alpecin de Philipsen, un síntoma de que la jornada olía claramente a esprint.

Ni estos dos equipos sacaron rédito a su trabajo ni los líderes tuvieron un final del todo plácido, con Primoz Roglic envuelto en una montonera, que lo aleja del podio final.

Lotte Kopecky gana la quinta etapa del Giro y acecha a Elisa Longo

La flamenca Lotte Kopecky se impuso al sprint en la quinta etapa del Giro femenino por delante de la italiana Chiara Consonni y de la cubana Arlenis Sierra y gracias a la bonificación se ha colocado a solo tres segundos de la líder, la italiana Elisa Longo, que se enfundó el maillot de líder tras imponerse en la primera etapa.

«Ha sido un final caótico, con muchas glorietas y mucha velocidad. Mis compañeras de equipo me an hecho un gran lanzamiento, ha sido perfecto, con Barbara posicionándome antes de la última curva», explicó vencedora.

«Hoy ha sido una buena etapa en la que he intentado gastar poco de cara al próximo tríptico que será decisivo para la general. Kopecky se ha acercado, pero me importa poco porque las diferencias serán mucho mayores los próximos días», explicó la líder del equipo Lidl-Trek, que afila los dientes.GARA