Al menos 70 personas han muerto en Yan Junis en las últimas 24 horas en nuevos bombardeos israelíes.

El hospital Nasser, el más importante de la zona, volvió a pedir ayer donaciones de sangre ante la avalancha de heridos que han llegado en los últimos días y que han llevado al centro hasta el borde del colapso.

Los militares hicieron estallar edificios residenciales en la localidad de Al-Qarara, en el noreste de la ciudad, y sus vehículos abrieron intenso fuego contra viviendas en la localidad de Bani Suhaila, en medio de disparos de artillería y bombardeos, informó la agencia oficial de noticias palestina, Wafa. Además, tanques y vehículos militares israelíes abrieron fuego contra un camión de ayuda humanitaria de la ONG Central World Kitchen Foundation.

El Consejo Noruego para los Refugiados (NRC) denunció que las organizaciones humanitarias sufren de una obstrucción sistemática, además de ataques directos por parte de Israel contra sus instalaciones, personal y puntos de distribución.

Las fuerzas israelíes abandonaron Yan Junis en abril, después de una dura operación que duró cuatro meses. Al concluir la ofensiva, el jefe del Estado Mayor, Herzi Halevi, llegó a decir que las Brigadas Al-Quds habían sido «disuadidas» tras perder la mayoría de sus capacidades militares. Ahora, aseguró que lanza numerosos cohetes desde la zona.

PRESOS CON SARNA

La ONG israelí Médicos por los Derechos Humanos alertó que cientos de palestinos presos en cárceles israelíes, incluidos en decenas de menores, están infectados de sarna, sobre todo en las unidades de seguridad, a causa del hacinamiento extremo y las males condiciones de higiene.