Amaia U. LASAGABASTER
FRANCIA 2019

«Aburrido» pero tentador

14 de las 23 futbolistas de la selección estadounidense tienen experiencia en el fútbol europeo. Francia es el destino predilecto delas internacionales norteamericanas. Ali Krieger y Alex Morgan llegaron a conquistar el título de Champions League.

«Como aficionada al fútbol, me gustaría que hubiera un poco más de variedad. A veces el fútbol europeo me parece un tanto aburrido», aseguraba Tobin Heath después de que se confirmara la presencia de siete equipos europeos en los octavos de final del Mundial de Francia 2019.

Tenga razón o no, habla con conocimiento de causa. En 2013 defendió la camiseta del Paris Saint Germain. Y aunque no pudo engordar allí su tremendo palmarés –es la única futbolista que, además de Mundial y Juegos, ha ganado también los títulos de NCAA y NWSL–, reconoce que la experiencia resultó «fundamental» en su carrera. «Me ayudó a crecer y me hizo mejor en mi profesión», asegura Heath, que incluso anima a sus compatriotas «a dar el paso».

Son muchas las que lo han hecho. De las 23 jugadoras que se ha llevado Jill Ellis al Mundial, 14 tienen experiencia en el fútbol europeo. Algunos finales han sido un tanto precipitados –Morgan Brian firmó con el Olympique por dos años y medio y regresó a casa en cinco meses–, pero la mayoría se han saldado con éxito.

El de Ali Krieger es uno de los mejores ejemplos. Debutó en la elite con el Frankfurt, con el que se convirtió en la primera futbolista estadounidense en conquistar la Liga de Campeones, en una campaña en la que también se hizo con Liga y Copa. Tras una escueta cesión en Washington, disputó otras tres temporadas con el Frankfurt, con el que ganó otra Pokal. Un año más tarde voló a Suecia para enrolarse en un Tyreso repleto de compatriotas, aunque no pudo repetir final de Champions porque regresó a casa, de donde ya no ha vuelto a moverse, antes de que acabara la temporada.

También Alex Morgan ha levantado el trofeo continental. Jean Michel Aulas le tiró los tejos durante meses hasta que consiguió convencerle de disputar la segunda vuelta de la 16/17 con el Olympique. Seguro que no se arrepintió. A los aproximadamente 200.000 euros que se embolsó por sus cinco meses en Lyon les añadió un trío de éxitos del que ninguna otra estadounidense puede presumir: Liga, Copa y Champions.

En las puertas se había quedado tres años antes Megan Rapinoe, que también con el OL conquistó Liga y Copa pero cayó en la final de Champions ante el Wolfsburgo. Hasta la final del torneo continental llegaron también con aquel Tyreso repleto de estrellas Ashlyn Harris y Christen Press, una de las que más cómodas se siente a este lado del charco: también en Suecia, ha vestido la camiseta del Goteborg en dos etapas.

Cerca, en Noruega, y con experiencias más cortas han probado también Adrianna Franch (Avaldsnes) y Becky Sauerbrunn (Roa). Alemania, por otro lado, fue el destino de Alyssa Naeher, que ganó dos Bundesligas con Turbine, y Ashlyn Harris, que estuvo en el Duisburgo antes de su paso por el Tyresso.

En los últimos años, Inglaterra se está convirtiendo en un destino con tirón. Carli Lloyd ganó la FA Cup con el City hace dos años –en una aventura que acabó antes de tiempo por un codazo en la cara a una rival que le costó tres partidos de sanción– y Crystal Dunn ganó la Liga con el Chelsea la temporada pasada.

Pero París sigue siendo el destino soñado de los estadounidenses, también de las futbolistas. Tanto que Lindsay Horan renunció a una beca para jugar con nada menos que Carolina del Norte al acabar la secundaria para dar el salto directamente al fútbol profesional, fichando por cuatro temporadas con el PSG. Solo tenía 18 años y la decisión le costó muchas críticas en Estados Unidos. Y pese a que tuvo un rendimiento espectacular en el equipo parisino, con el que llegó a disputar la final de Champions, no tuvo hueco en la selección hasta que voló a la Liga estadounidense, hace dos años y medio. «Nunca me he arrepentido», asegura Horan, que esta noche jugará «en casa».

El Mundial perderá hoy a uno de sus principales candidatos

Final anticipada. Así se califica al encuentro que enfrentará hoy en el Parque de los Príncipes (21.00) a Francia y Estados Unidos. Anfitrión y vigente campeón, uno de los principales candidatos a levantar el trofeo el próximo 7 de julio en Lyon, tendrá que hacer las maletas esta misma noche.

Si los antecedentes sirven de algo, el equipo de Corinne Diacre no tiene nada que hacer. 17 victorias estadounidenses y tres empates en 25 amistosos. Y pleno en sus tres enfrentamientos oficiales: el Mundial de 2011 y los Juegos de Londres y Río. A las galas les puede quedar el consuelo de haberse impuesto en su último amistoso, el pasado enero, pero su propia seleccionadora reconoce que «el contexto es muy diferente. Era un amistoso de preparación, hace ya medio año y ellas acababan de reencontrarse. No se puede comparar».

Diacre, de hecho, asegura que Francia se enfrenta hoy «al mejor equipo del mundo». «Pero nada es imposible», recuerda. El primer paso para superar la ronda de cuartos, que Francia solo ha logrado en una ocasión, pasa por «mejorar lo que hicimos ante Brasil», el partido más flojo de las anfitrionas en su Mundial.

Claro que Estados Unidos puede decir algo parecido, después de los problemas que tuvo para superar a España en cuartos. «Francia tiene un equipo excelente –advierte Tobin Heath–. En ataque son explosivas y tienen buenas defensas, es un equipo muy equilibrado». A.U.L.