EA se ha congratulado por que el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) haya estimado la demanda de Martxelo Otamendi y el Estado español tenga que indemnizarle con 24.000 euros por no investigar su denuncia de torturas y no poner los medios necesarios para ello.
En un comunicado, ha recordado que siempre ha puesto en marcha iniciativas para «evitar las torturas y malos tratos a los detenidos en dependencias policiales», que han sido denunciadas también en los informes de Amnistia Internacional y de otros organismos internacionales en los que se recogía que «la práctica de la tortura es un problema estructural en España».
Por ello, ha mostrado su deseo de que esta sentencia «sea motivo de reflexión y se ponga fin a la práctica de la tortura en el Estado español».