La intención de la empresa era la de comunicar, este mismo lunes, su determinación, por lo que se prevé que así lo haga. El sábado pasado, este órgano se reunió después de el viernes su director general, Sergio Treviño, manifestara a los trabajadores de la planta de Basauri que Edesa no es viable y está abocada al concurso. Sin embargo, el Consejo concluyó un encuentro sin fijar una posición definitiva.

Mientras tanto, los trabajadores de Edesa, filial vizcaina de la cooperativa, se encuentran a la espera de conocer la postura que condicionará su futuro.

Este domingo, reunidos con sus familias en una paellada celebrada en la factoría, han manifestado su malestar por el hecho de que la dirección de la empresa «puenteara» al Consejo Rector y comunicara el rechazo a la oferta de la Diputación vizcaina si estar adoptada la decisión oficial.

Han dicho no comprender la situación y han manifestado sus sospechas de que exista una pretensión de venta de la fábrica basauritarra para «saldar alguna cuenta pendiente».

La plantilla ha acordado mantener el encierro indefinido iniciado el pasado 5 de noviembre y no han descartado celebrar una manifestación en la localidad vizcaina para exigir soluciones.

Asimismo, los trabajadores de Edesa partirán este lunes, a las siete y media de la mañana, en autobuses hasta Arrasate, donde un grupo de socios tiene previsto desarrollar una cadena humana que partirá de la sede de la Corporación hora y media después.

Concurso

Además, Fagor Electrodomésticos presentará esta próxima semana concurso de acreedores, con el que abandonaría su situación de preconcurso y avanzaría a la liquidación de la emblemática cooperativa de la Corporación Mondragon, ya anunciada por las instituciones.

Con la solicitud de concurso, Fagor Electrodomésticos se sumaría a la situación de su filial polaca Mastercook, para la que presentó el pasado 31 de octubre concurso de acreedores en el Juzgado de lo Mercantil número 1 de Donostia, y Fagor Brant en el Estado francés, en suspensión de pagos seis días más tarde.

El grupo, con una deuda de 850 millones, precisaba de 170 millones para garantizar su futuro y, recurrió a Mondragon, a la que solicitó 50 millones para su financiación, después de que en mayo aprobara por unanimidad la creación un fondo de reestructuración y empleo societario de apoyo a la cooperativa de 70 millones de euros.

Sin embargo, en esta ocasión, la Corporación rechazó aportar más ingresos al considerar que no se podía exigir más esfuerzos al resto de cooperativas y entender que tampoco era la solución. Tras esta decisión, anunció que su prioridad es el empleo y su pretensión de reubicar y prejubilar, en próximos meses, a un colectivo de entre 1.000 y 1.200 trabajadores de Fagor Electrodomésticos.