La juez María Paz Benito ha citado a declarar como imputado a Simón Santamaría, jefe de la Policía Municipal de Iruñea, y otros cuatro inspectores y comisarios de ese cuerpo por amenazas, falsedades, coacciones y discriminación laboral, entre otros delitos.
Barcina, que ha sido alcaldesa de Iruñea durante doce años, ha señalado a los periodistas que le consta el «buen hacer» de la Policía Municipal de la ciudad, por lo que espera que «la Justicia actúe como siempre, con justicia» y se ponga de manifiesto la corrección en la actuación de los agentes.
Por su parte, el alcalde de Iruñea, Enrique Maya, que junto a Barcina ha participado en un acto de entrega de cruces de Carlos III, ha indicado que conocía las denuncias y ha precisado que también se pedía su imputación en la causa, que finalmente no se ha llevado a cabo.
Maya ha mostrado su confianza en la Justicia, en que «todo se aclare» y que la imputación «se quede ahí» y no vaya a más. Ha resaltado que no tiene «la más mínima duda» sobre Santamaría y «todos y cada uno de los responsables de la Policía Municipal».
No obstante, ha apuntado que, si se demostrara la comisión de algún delito, «no es que no habría confianza, es que seguro que él directamente se iría» de la Policía Municipal, porque a su juicio ningún cargo público puede seguir ejerciendo sus funciones en ese supuesto.
El concejal de Seguridad Ciudadana, Ignacio Polo, ha pedido «prudencia» hasta que haya un pronunciamiento judicial y ha mostrado a Efe su «total apoyo y confianza» en la gestión de Santamaría, que «es una muy buena persona y un maravilloso profesional, que ha transformado la Policía Municipal de Pamplona, haciéndola una policía moderna, eficaz y adaptada a las nuevas tecnologías».
Santamaría «es un policía reconocido y querido por los pamploneses», ha dicho.