En una carta dirigida a militantes y simpatizantes, Chacón carga contra la «ceremonia de la confusión» creada por el actual líder del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, tras los malos resultados electorales del pasado día 25 de mayo y le acusa de maniobrar para que no se celebren las primarias abiertas previstas inicialmente para el próximo mes de noviembre.
«Las primarias abiertas no son solo una cuestión de democracia; se han convertido en la única vía de recuperación del partido», defiende en la carta la exministra de Defensa y de Vivienda, que reitera que trabajará para que estas se celebren finalmente y anticipa que «cuando sean convocadas» concurrirá a las mismas.
Por contra, considera que las decisiones adoptadas por Alfredo Pérez Rubalcaba evidencian su propósito de «evitar nuevamente a toda costa» la celebración de estas primarias abiertas «que estaban aprobadas, reguladas y convocadas» y le acusa de maniobrar para sustituirlas «por un sucedáneo confuso e improvisado y fraguado fuera de las reglas y los órganos legitimados del partido».
En este sentido, anuncia que de cara a ese congreso para elegir al nuevo secretario general del partido apoyará «al candidato o candidatos que se comprometan a la celebración de unas elecciones primarias abiertas con fecha cierta», es decir, con un calendario cerrado.
«Lo que haré después será trabajar junto con los cientos de afiliados y progresistas independientes que me han acompañado en este período y a quienes agradezco infinitamente su entusiasmo y su compromiso. Trabajaré desde el partido y en la sociedad. Lo haré por la rectificación de las políticas seguidas en los últimos años y por la recuperación de los valores de una izquierda comprometida con la igualdad y con vocación de gobierno».
En la carta abierta a militantes y simpatizantes, la exministra reitera su compromiso para trabajar en la convocatoria de unas elecciones primarias abiertas «en las que puedan participar todos los ciudadanos progresistas» y anticipa que «cuando sean convocadas» concurrirá a esas elecciones.
«Nuestro problema no es interno sino de credibilidad social. Eso significa que si decimos izquierda, debemos hacer izquierda; si decimos primarias, debemos hacer primarias. Hemos perdido la conexión con la sociedad y solo la recuperaremos si demostramos un propósito sincero de rectificación de nuestras políticas, nos abrimos y escuchamos», concluye.