La banca del Estado español ha superado los test de estrés del Banco Central Europeo y la Autoridad Bancaria Europea, ya que las quince entidades que se han sometido al examen cuentan con una solvencia de al menos el 5,5 % en el escenario más adverso, según los datos conocidos.
Liberbank y el Banco Popular son las entidades que aprueban con menos margen porque sus ratios de capital se quedan en el 5,6 % y el 7,6 %, respectivamente, en el peor de los casos.
En el otro extremo, los bancos del Estado español que cuentan con un mayor superávit de capital y por tanto mayor solvencia son Kutxabank, con un 11,9 %; Bankinter, 11 %; BFA-Bankia, con un 10,3 %; CaixaBank, con un 9,3 % y NCG, ahora rebautizado como Abanca, con un 9,1 %.
A continuación figuran BBVA, con un 9 %; seguido del Banco Santander y Unicaja, ambos con un 8,9 %.
Por debajo de este nivel aparecen el Grupo Cajamar y Catalunya Banc, ambos con un 8 % e Ibercaja, con un 7,9 %.
El examen mide la capacidad de estas entidades de mantener siempre un colchón de capital del 8 %, que se reduce al 5,5 % en el peor de los casos, puesto que son dos los escenarios que plantea el examen: uno base, con las estimaciones económicas de cada país previstas por la Comisión Europea, y otro «estresado» o adverso.
Este último supuesto, que en ningún caso se trata de una previsión sino de una hipótesis, supone que en el caso de España que el PIB se contraería un 0,3 % este año, un 1 % en 2015, y apenas crecería un 0,1 % en 2016.
También prevé nuevas turbulencias en el mercado inmobiliario español, en el que los precios de la vivienda caerían un 3,1 % este año y un 5 % en 2015 y 2016.