El periodista de GARA Alberto Pradilla (@albertopradilla) ha recordado al juez Grande-Marlaska las sentencias del Tribunal Europeo de Derechos Humanos que le censuran por no investigar denuncias de torturas. Asimismo, ha señalado las denuncias de otros organismos respecto a la persistencia del maltrato en el Estado español y le ha llegado a citar una reciente sentencia de la propia Audiencia Nacional en la que ponía en tela de juicio su instrucción.
El juez ha replicado que siempre que ha habido el mínimo indicio de maltrato ha deducido testimonio, y ha mostrado su incomodidad por someterse a un «interrogatorio» sobre sus actuaciones judiciales concretas, aunque ha seguido contestando en todo momento, como se aprecia en el corte de vídeo extraído del programa ‘Por fin, viernes’.
Grande-Marlaska –en la actualidad presidente de la Sala Penal de la Audiencia Nacional y vocal del CGPJ– ha sido entrevistado por varios periodistas en el programa “Por fin viernes”, de ETB2, en el que se le ha preguntado por la sobra de sospecha sobre la tortura a raíz de las sentencias internacionales. Ha replicado que por dos sentencias no se puede llegar a esa conclusión y, cuando le han indicado que las sentencias ya son seis, ha manifestado que no quería entrar en números. En todo caso, entende que el sistema judicial español no está en cuestión.
La condena del Tribunal Europeo de Derechos Humanos a la que se ha hecho referencia expresa en el programa es la relacionada con la denuncia por torturas no investigada de Beatriz Etxebarria. Alberto Pradilla ha mostrado el informe médico-forense del día siguiente de la detención de Etxebarria, en el que esta detalla que está padeciendo tormento. Marlaska ha indicado que esa denuncia no fue corroborada por el médico-forense y ha reiterado que el mínimo indicio le es suficiente para actuar.
Etxebarria fue detenida junto con otras tres personas el 1 de marzo de 2011, en una operación ordenada por este magistrado y desarrollada en Bilbo y Galdakao. De los cuatro arrestados, tres fueron finalmente acusados de formar un comando de ETA. En el informe médico-forense sobre Beatriz Etxebarria datado justo al día siguiente, la detenida, que permanecía incomunicada, denunció que le intentaron introducir un palo de escoba en la vagina, que le colocaron una bolsa de plástico en la cabeza y que llegó a perder el conocimiento, así como que le amenazaron con aplicarle electrodos. Esta denuncia no provocó reacción alguna por parte del juez instructor.
El periodista de GARA le ha citado también la sentencia en la que se absolvía a 40 miembros de Segi y en la que el tribunal de la Auciencia Nacional apeló al Convenio contra la Tortura, para recordar que este «obliga a todo Estado a asegurarse de que ninguna declaración que se demuestre ha sido hecha como resultado de tortura pueda ser invocada como prueba en un procedimiento». La instrucción del caso, en cuya vista oral se pudieron escuchar terribles testimonios de tortura, fue realizada por Grande-Marlaska. Esta alusión a dicha sentencia ha incomodado al juez, que ha replicado que sus argumentos están recogidos en sus resoluciones judiciales.
En la entrevista han sido citadas diferentes cuestiones, ante las que el juez ha defendido el sistema judicial y sus garantías. Marlaska ha negado que exista ninguna vulneración de derechos fundamentales en el caso de los presos vascos, ha apoyado la denominada “vía Nanclares” y, respecto a la situación de Arnaldo Otegi, se ha limitado a indicar que es consecuencia de una «sentencia firme» por el delito de «integración en banda armada».
Otra situación incómoda para Marlaska se ha producido cuando las víctimas del 3 de marzo, desde una grabación realizada previamente, le han preguntado por qué el Estado español ampara la impunidad. Ha negado la mayor, ha dicho que no hay tal impunidad y se ha referido a la Ley de la Amnistía del 77, después de que una juez argentina haya procedido contra responsables de la represión franquista.