1. Barcina se compara con un paleta

En pleno apogeo por el escándalo de las dietas de Caja Navarra, la presidenta se desmarcó en un entrevista en TVE, diciendo que «en aquel tiempo» esos salarios estaban a la orden del día. Hablamos de la friolera de 89 euros por minuto de reunión, de empalmar las reuniones de dos en dos (o de tres en tres) y ventilarlas en 30 minutos. De este modo, la presidenta Barcina se embolsaba al día –y al margen de su sueldo como presidenta– minucias como 5.260 o hasta 8.040 por media mañana. Por este escándalo, Barcina acabó cerrando el chiringuito de la Permanente (el órgano opaco que la juez de Iruñea Mari Paz Benito entendió como ilegal) y la Junta de Entidades Fundadoras. No obstante, cabe recordar que a cambio de este «sacrificio» de renunciar a las dietas, la presidenta se subió el sueldo un 33%. Le hicieron falta los votos del PSOE, que accedió encantado. En aquel momento, Roberto Jiménez aún era vicepresidente y la subida afectó a todos los miembros del Gobierno. A él en concreto, le suponía un 25%, o lo qe es lo mismo: 16.135 euros anuales. La subida se produjo a finales de 2011, en lo más crudo de la crisis, entre rumores de rescate al Estado español. (ARGAZKIA: Iñigo URIZ-ARAGAZKI PRESS)

Postdata: Como su remuneración dejó de basarse en dietas y se aumentó su asignación como presidenta, ahora sus cesantías serán un 33% más altas.

2. Y  comprar partidos... tampoco

El exgerente de Osasuna, Ángel Vizcay, tuvo un arranque de sinceridad después de que una auditoría del Consejo Superior de Deportes detectara fugas de dinero a paraísos fiscales. Confesó que el fin de esas partidas (por valor de varios millones y que ahora se investigan bajo secreto de sumario) era amañar partidos. De paso, afloraron los detalles de cómo se acumularon 53 millones de euros hasta el año pasado, a lo que hay que añadir el aumento de entonces a esta parte, que vienen a ser otros 20 más. Y es que, directamente, Osasuna dejó de pagar el IVA un mes, luego otro y, al poco, pasó por completo de Hacienda. Y el Gobierno fue concediendo aplazamientos en un evidente trato de favor. Vizcay acabó reconociendo públicamente diciendo que Hacienda hizo la vista gorda, incluso confesó que hay un inspector que que, tras detectar que había fugas de dinero para comprar partidos, les aconsejó la mejor forma de taparlo. (ARGAZKIA: Idoia ZABALETA)

3. Pues al final, ni lo uno ni lo otro

Elegir una frase del exlíder del PSN ha sido complicado. De aquel «Con UPN no me une absolutamente nada y está descartadísimo que vayamos a gobernar juntos» (junio 2011) al más cercano «el PSOE en Navarra soy yo» (febrero 2014), ha habido intervenciones ciertamente jugosas. Puestos a elegir una, quizá la que más le retrate fue aquél órdago que le lanzó a Barcina antes de la comisión de investigación de la Hacienda Navarra. «O se va o la echamos», proclamó. Tanto metió la pata que obligó a intervenir a Alfredo Pérez Rubalcaba para volver a dejar bien claro que el PSOE en Navarra es... Madrid. Y que el régimen es el régimen, claro. Lejos de suponer su caída, Jiménez ganó poder dentro del PSOE cuando se demostró que su órdago fue un farol. Desde entonces tiene un cómodo puesto en Ferraz, como responsable de inmigración de la Ejecutiva del PSOE. (ARGAZKIA: Jagoba MANTEROLA)

4. La «omertá»

Esta frase del Rector Magnífico de la Universidad del Opus Dei, Alfonso Sánchez-Tabernero, no resulta espeluznante en una primera lectura, pero en el fondo es aterradora. La afirmación se realiza tras la polémica suscitada por el acuerdo de UPN de venderle el centro público Donapea, anejo a las hectáreas que en su día cedió el Ayuntamiento a la Universidad. La pretensión del Opus Dei sobre esa colina viene de décadas atrás y la intentona frustrada de esta legislatura llegó con la promesa de instalar unos centros de investigación. El PSN en Iruñea cambió de postura y Sánchez-Tabernero amenazó con llevarse los centros a otro lugar. Se generó enfado social, UPN incluso aludió la posibilidad de un PSIS irregular hasta que, finalmente, el Opus Dei desistió y deshizo el contrato. Lo preocupante es el porqué. Como explicó en un inusual discurso el discreto rector, el motivo de aparcar el proyecto no es su renuncia a la colina de Donapea (la siguen queriendo para su «coto redondo»), sino que quieren hacerse con ella sin «polémica», sin «política», sin ruido. Como siempre han hecho... Como ocurre en Italia. (ARGAZKIA: Idoia ZABALETA)

5. El alcalde de todos

Con el alcalde de iruñea ocurre casi lo mismo que con Roberto Jiménez, que tiene muchas frases para enmarcar, como cuando dijo que si una ciudad debía elegir entre personas y «cemento», el haría «un alegato en favor del cemento», porque es lo que queda para la posteridad. Es una pena, sí, que las personas sean seres vivos y, por lo tanto, envejezcan y mueran, pero tampoco es para ponerse así. Otros grandes momentos los vivió tras los pasados sanfermines, después de que aparecieran imágenes deel jefe de sus escoltas utilizando armas no reglamentarias. O cuando justificó la agresión de Simón Santamaría, con la punta de su vara de mando en la procesión del 2014, diciendo que es difícil contenerse en situaciones así, que hay que tener «temple». Pero la frase aquí escogida, junto con el detallito de que exigió a las peñas sanfermineras participar en la procesión religiosa para cobrar la subvención, hacen una semblanza bastante firme de lo que debe de ser un alcalde de Iruñea para el régimen. Y en eso Maya es digno sustituto de Barcina. Hasta cobró dietas de CAN. (Idoia ZABALETA-ARGAZKI PRESS)

6. Vivir por encima de nuestras posibilidades

Sanz soltó esta perla en 2008, al hilo de la decisión de José Luis Rodríguez Zapatero de repartir a todos los contribuyentes 400 euros. ¡Cómo han vivido (y cenado) algunos! Y de los impuestos de todos. En unas elecciones se vota por muchas cosas: por afinidad política, imagen de gestión, identidad nacional, religión, creencias, proyectos concretos... Y hay quien se aprovecha y se sigue aprovechando. Para que Sanz pudiera seguir con su sibaritismo gastronómico, UPN lo puso al frente de Audenasa, la empresa semipública de autopistas. Y su amigo Enirque Goñi, el exdirector de CAN, lo puso al frente de Bodegas Sarría pese a tener solo conocimientos enológicos a nivel de usuario. Sus contactos con VW lo auparon al consejo de administración de Truck and Wheel. Curiosamente, también aparece en el consejo de Servicios Ecológicos de Navarra, una empresa especializada en deshacerse de vertidos tóxicos con una ubicación sorprendentemente cercana a MercaIruña, el lugar donde desembocan los alimentos frescos que abastecen a media Nafarroa. Y a pesar de todos estos cargos, cobró cesantías por dejar de ser presidente de Nafarroa hasta que se le agotaron –un 80% del sueldo de lo que antes cobraba, durante dos años–. (Jagoba MANTEROLA-ARGAZKI PRESS)

Postdata: El incremento patrimonial de Miguel Sanz está siendo ahora mismo investigado por la Udef a raíz del «caso CAN». Al poco de dejar el cargo, Sanz apareció como administrador único de una sociedad que, durante sus mandatos, estuvo a nombre de su hijo. Junto con el cambio de administradores, aparecieron en la empresa 400.000 euros, fruto de una ampliación de capital. Sanz alegó posteriormente que la mitad de ese dinero era de Ángel de la Fuente (propietario de MTS Tobacco, una empresa a punto de desaparecer tras dejar una deuda de 3,5 millones a Sodena y con 55 trabajadores a punto de perder su trabajo).