«Espero que sea la cumbre decisiva, pero el balón está en el campo griego. Deben presentar propuestas», ha declarado el primer ministro italiano, Matteo Renzi, al término de la cumbre de líderes de la eurozona celebrada en Bruselas.
Esta cumbre estará precedida por una reunión el sábado de ministros de Economía y Finanzas de la eurozona.
«La situación es muy grave y lamentablemente no podemos excluir el peor escenario, que no haya acuerdo, y hay que discutir las consecuencias para toda Europa", ha declarado el presidente del Consejo, Donald Tusk, para justificar que la cumbre del domingo no sea a 19 (eurozona) sino a 28 (UE).
La canciller alemana, Angela Merkel, ha dejado claro que quiere ver reformas estructurales concretas en la lista de medidas que presentará el primer ministro griego, Alexis Tsipras. Merkel ha asegurado además que no habrá quita de la deuda helena.
«Una quita no va a producirse. Esto es un programa de rescate de la eurozona y no está permitido. Si es necesario estamos dispuestos, después de que Grecia haya cumplido sus obligaciones, a hablar sobre la cuestión de la sostenibilidad», ha manifestado.