Agustín GOIKOETXEA
BILBO

La izquierda abertzale insiste en su apuesta por la ruptura democrática

Tres mil personas participaron ayer a la tarde en Bilbo en una movilización convocada por Sortu en la que la izquierda abertzale renovó su compromiso por la independencia y el socialismo, tal y como lo hicieron hasta su muerte en sendos atentados Santi Brouard y Josu Muguruza. En el acto final, en el muelle del Arenal, Amaia Izko manifestó que pueden decir «alto y claro que el futuro de nuestro pueblo pasa por la ruptura democrática con el Estado español».

Tres miles personas marcharon desde la Alameda de Rekalde, donde cayó abatido por las balas mercenarias en su consulta de pediatría Santi Brouard, hasta El Arenal para recordarle a él y a Josu Muguruza, de cuya muerte en atentado se cumplieron ayer 31 y 26 años, respectivamente. Jóvenes y veteranos reivindicaron sus figuras y su lucha por la independencia y el socialismo.

Al frente de la manifestación, portando una pancarta con el lema ‘‘Santi, Josu, zuen ametsa gure iparra. Independentzia eta Sozialismoa’’, familiares de los dos militantes de la izquierda abertzale y, entre otros, José Luis Elkoro, uno de los mahaikides que se encontraban junto a Muguruza la noche del 20 de noviembre de 1989 en el Hotel Alcalá de Madrid cuando fueron tiroteados.

Al poco de iniciar la marcha, los participantes comenzaron a corear consignas como «Santi, Josu gogoan zaituztegu» y «independentzia, sozialismoa», al que se sumó «Estatu espainola, estatu terrorista» cuando se encontraban junto a la subdelegación del Gobierno español en la plaza Elíptica para seguir por Gran Vía, Buenos Aires y alcanzar el muelle del Arenal, donde se desarrolló un acto político.

Antes, dos jóvenes interpretaron una canción y dos dantzaris bailaron un aurresku a Edurne Brouard y Ane Muguruza, a las que Elkoro y Amaia Izko, portavoz de Sortu, entregaron sendos ramos de flores.

«Balazos a las ofertas de paz»

A continuación, Izko tomó la palabra para incidir en el modo en que las «balas guiadas y financiadas por las cloacas del Estado» acabaron con las vidas de Brouard y Muguruza. «Una vez más –enfatizó–, el Estado respondía a balazos a las ofertas de paz de la izquierda abertzale. Ayer y hoy, los enemigos de la paz responden con violencia y represión a los intentos de resolución del conflicto político».

La portavoz subrayó que la izquierda abertzale tiene «absolutamente claro» que «no existe margen para la democracia, ni para la paz, ni para el reconocimiento ni ejercicio de los derechos que como pueblo nos corresponden en el marco del Estado español». Por ello, Sortu cree que el futuro de los ciudadanos vascos pasa por la ruptura democrática con el Estado, tal y como viene reivindicando desde hace 40 años.

Para hacer frente a ese reto, insistió en la necesidad de readecuar el «proceso de liberación nacional y social a la situación y momento político actual» para «abrir de par en par las puertas al Estado Vasco». De ahí, el proceso de reflexión y debate ‘‘Abian’’, en el que pretenden implicar al mayor número posible de personas que tienen como referente a la izquierda abertzale «para una redefinición y renovación estratégica de largo alcance». Amaia Izko destacó la importancia de «la participación de todas» en ese proceso.

La portavoz de Sortu insistió en la necesidad de dejar de mirar a Madrid y París pues «la clave está en Euskal Herria». Incidió en la transcendencia de abrir las puertas a un nuevo ciclo por la independencia a través del que alcanzar esta y el socialismo, y donde la justicia social, el feminismo y el euskara sean también piedras angulares de ese Estado Vasco que anhela una parte muy importante de la sociedad vasca. Mismo objetivo, apuntó, que tuvieron Santi Brouard y Josu Muguruza.