El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, ha abogado por que de París salga un acuerdo «universal, ambicioso, creíble y a largo plazo» para descarbonizar la economía mundial, pero también un pacto «solidario con los más vulnerables y con compromisos de adaptación para los países en desarrollo».
Por ello, ha solicitado a los líderes mundiales «acelerar» la ambición de los compromisos climáticos presentados para el acuerdo global de cambio climático que se prevé aprobar en París con el fin de lograr que la temperatura del planeta no aumente más de 2 grados a finales de siglo frente a los 2,7 grados que implicarían las contribuciones actuales.
Ban ha subrayado que los delegados allí presentes tienen en sus manos «el futuro de las generaciones venideras». El secretario general de Naciones Unidas se ha dirigido a los más de 150 líderes mundiales y miles de delegados de los países congregados en París: «Estamos en el mismo lugar con un objetivo común, tenemos el poder de cambiar las cosas, elijamos el camino del compromiso, la flexibilidad y el consenso».
«Nos dirigimos hacia un futuro bajo en emisiones y no hay vuelta atrás», ha señalado. Asimismo, ha hablado de un acuerdo con compromisos revisables al alza cada cinco años, empezando en 2020, y «con flexibilidad para los países de capacidades limitadas».
Ante ello, ha remarcado que «no está permitida la indecisión», y ha recordado que «la sociedad civil ha salido a la calle pidiendo el cambio».