Miles de personas (6.000 según la Policía Municipal y 9.000 según los organziadores) se han manifestado en Iruñea en apoyo a los trabajadores de la planta de TRW del polígono Landaben y en protesta por el ERE presentado por la dirección para el despido de 250 de los 620 empleados de la factoría.

«Ha sido una movilización histórica», han proclamado los miembros del comité de empresa de TRW al final de la manifestación. Los manifestantes, que portaban una pancarta con el lema ‘Defendamos el empleo en Navarra-Nafarroako enpleguaren defentsan’, ha comenzado frente a la antigua estación de autobuses, y han recorrido el centro de la ciudad hasta terminar la marcha en el Paseo Sarasate, donde se ha leído un comunicado.

Esta manifestación ha contado con el apoyo de todos los partidos con representación parlamentaria, los sindicatos, más de 400 comités de empresa y más de 100 ayuntamientos de todas las zonas de Nafarroa, además de organizaciones sociales y personalidades del mundo de la cultura y el deporte.

Así, además del alcalde de Iruñea, Joseba Asirón, y la presidenta del Parlamento foral, Ainhoa Aznárez, han participado en la misma concejales y parlamentarios de UPN, EH Bildu, Geroa Bai, PSN, Podemos, Izquierda-Ezkerra y PP, los máximos dirigentes de los sindicatos navarros, y representantes de comités de empresas de otras industrias con problemas laborales como Faurecia, Alstom o Legrand.

El presidente del comité de empresa de TRW, Josi Álvarez, de CCOO, ha leído un comunicado en el que se destaca que el comité de empresa rechaza las actuaciones de la multinacional ZF-TRW y «las que también están padeciendo muchos trabajadores y trabajadoras de la sociedad navarra».

«No estamos solos en la defensa de un derecho democrático como es el derecho al trabajo», han destacado los trabajadores, señalando que el ataque que están sufriendo por parte de la multinacional ZF-TRW afecta a toda la sociedad navarra.

«Es hora de pasar de las palabras a los hechos para cambiar las políticas regresivas», asegura el comité, que subraya que los trabajadores reclaman al Gobierno «que se implique a Volkswagen en la solución de nuestra situación».