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PARÍS

El Gobierno francés introducirá cambios en el proyecto de reforma laboral tras la jornada de protestas

La ministra francesa de Trabajo, Myriam El Khomri, ha anunciado que, tras la primera jornada de movilización contra la reforma laboral –que ayer sacó a la calle a cientos de miles de personas en el conjunto del Estado–, el Gobierno hará dos modificaciones sobre ese proyecto.

Protesta contra la reforma laboral, ayer en Burdeos. (Nicolas TUCAT/AFP)
Protesta contra la reforma laboral, ayer en Burdeos. (Nicolas TUCAT/AFP)

«Hay que responder a un cierto número de críticas», ha admitido El Khomri en una entrevista con la emisora de radio France Info en la que ha desgranado, en particular, dos modificaciones en la proposición de ley de reforma laboral que prepara y que debe adoptarse en consejo de ministros el próximo día 24.

En primer lugar, ha dicho que se prevé imponer cotizaciones suplementarias a los contratos temporales para «reducir la precariedad» ya que las personas que trabajan con ese régimen tienen dificultades para alquilar una vivienda o conseguir un crédito.

Ha precisado que en 2013 ya se instauró un suplemento de cotización a favor del fondo de indemnización del desempleo para los contratos de duración más corta pero eso «no tuvo el efecto esperado» porque se trataba de un incremento «modesto» y no cubría todos los contratos temporales.

Ahora, lo que se pone «encima de la mesa» para que discutan sindicatos y patronal es generalizar unas cotizaciones más elevadas para todos los contratos temporales.

La segunda concesión a la que ha aludido la ministra es suprimir del primer montaje de su proyecto de ley una disposición que hubiera permitido prolongar el tiempo de trabajo de los aprendices. En la actualidad sus horarios se pueden prolongar hasta 40 horas semanales si se obtiene el visto bueno de los inspectores laborales.

Más allá de estos cambios, El Khomri ha mostrado su intención de seguir adelante con la reforma laboral, pese a que los sindicatos que organizaron las protestas de ayer exigían su retirada.

Lo ha justificado porque aunque el Gobierno del presidente François Hollande ha hecho «mucho» desde que entró en funciones en 2012, y ahora el Estado francés está en «una dinámica más positiva», no consiguen «tratar problemas de fondo» en la sociedad, sobre todo la falta de flexibilidad: «Creo que nuestro sistema está agotado».

Reforma «necesaria»

«En nuestro país –ha argumentado– tenemos un mercado laboral que es rígido. Creamos menos empleo que los demás», y eso pese a que el pasado año se crearon 82.300 en los sectores abiertos a la competencia (un alza del 0,5%), según los datos comunicados por el Instituto francés de Estadística (INSEE).

«Esta reforma –ha concluido– es necesaria. Tiene que ser equilibrada, pero es necesaria».

La ministra ha insistido en que va a continuar la concertación con los sindicatos y la patronal para incorporar modificaciones, y ha señalado que el próximo lunes se presentará una nueva redacción.

En una primera reacción a las concesiones del Ejecutivo, Sophie Binet, dirigente de la Confederación General del Trabajo (CGT, una de las centrales organizadoras de la movilización de ayer) ha considerado que «es una buena noticia pero no responde» a lo que le exigen, que es que «el proyecto de ley se tiene que retirar».