El acto de homenaje a las víctimas del bombardeo de Durango se ha desarrollado en el cementerio de la localidad y a él han acudido familiares de las víctimas y testigos de lo ocurrido, además de autoridades como el lehendakari Iñigo Urkullu; el diputado general de Bizkaia, Unai Rementeria; la presidenta de las Juntas Generales de Bizkaia, Ana Otadui; y la alcaldesa de Durango, Aitziber Idigoras, entre otros representantes municipales.

En el transcurso del homenaje se han hecho sonar las campanas de la iglesia de Santa María, como ocurrió hace 79 años, se ha guardado un minuto de silencio y se han llevado a cabo dos ofrendas flores ante un monolito dedicado a las víctimas del bombardeo y en una capilla que preserva en una placa sus nombres.

La alcaldesa de Durango ha lamentado que a la «masacre» causada por los bombardeos de la Aviación Legionaria Italiana sobre la villa le siguieran «muchos años de silencio y olvido, mentira, miedo y persecución».

Por ello, ha abogado por recordar lo ocurrido para «curar heridas, asumir nuestro pasado y fijar las bases de la paz futura, sin rencores».

Ha dicho que es necesario evocar a las personas muertas y heridas por estas bombas, pero ha señalado que también es preciso recordar a quienes, «para salvar su vida, huyeron».

Llamamiento a Europa

De esta manera, se ha referido a «las miles de personas refugiadas» que en la actualidad «dejan sus vidas en las orillas de esta Europa a la que pertenecemos», y que «solo buscan salvar sus vidas y las de sus familias».

Ha apuntado que «la misma historia» que vivieron durante el franquismo los «niños y niñas de la guerra» y los vascos que encontraron refugio en «campos de toda Europa» se repite ahora con los refugiados que huyen de las guerras en busca de un futuro.

Para todos ellos, «es nuestra obligación» procurarles «cobertura y sustento» y «un lugar seguro donde poder vivir».

«Desde la humildad de este Ayuntamiento quiero reclamar de Europa solidaridad y humanidad. Nosotras y nosotros también somos refugiadas y refugiados y queremos proclamar que todas las guerras son iguales y sólo nos ofrecen venganza, destrucción, hambre y odio», ha manifestado, al tiempo que ha hecho un llamamiento «a esta Europa que está dejando morir en sus costas a multitud de refugiados».