En una mesa redonda sobre el desarrollo para un nuevo estatus, organizado por Eusko Ikaskuntza y el Gobierno de Lakua, en la que también han participado Andoni Ortuzar (PNV), Idoia Mendia (PSE), Borja Sémper (PP) y Gorka Maneiro (UPyD), Arraiz ha explicado que «es momento de un acuerdo de país entre todos los que defendemos el derechos a decidir».

El portavoz de la coalición abertzale ha defendido, además, que ese acuerdo «también debe ir más allá de las cuatro paredes» del Parlamento, y ha añadido que deben ser partícipes todos los partidos políticos, sindicatos y agentes sociales, culturales y económicos que defienden el derecho a decidir. Ha concretado que ve opciones de hacer ese acuerdo entre los partidos EH Bildu, Podemos, Ezker Anitza y el resto de formaciones que defienden el derecho a decidir.

Ha mostrado la disposición de la coalición soberanista a avanzar en el desarrollo del estatus de la CAV y a hacer un camino junto al PNV en la ponencia de autogobierno del Parlamento de Gasteiz, pero ha remarcado que EH Bildu «no se conforma con eso».

«Este momento –ha abundado– necesita algo más que un acuerdo sobre el derecho a decidir que se ciñe a la ponencia de autogobierno y a dos fuerzas políticas; este momento requiere actuar con mayores cotas de responsabilidad».

Ha afirmado que están dispuestos a «elaborar un texto articulado concreto e ir con ello a Madrid», pero antes, ha aclarado, «debemos tener claro que la respuesta de Madrid va a ser negativa», por lo que considera que, ante esa situación «tenemos que tener elaborado y consensuado un plan con los pasos a dar para avanzar». 

«Se debe llevar a cabo una consulta habilitante para que la ciudadanía vasca otorgue a nuestras instituciones las competencias que a día de hoy nos niega Madrid», ha explicado Arraiz, que ha concluido indicando cómo entiende el nuevo estatus: «disponer aquí de todas las competencias y gestionarlas desde aquí y para las personas de aquí». «Estamos hablando de gestionar aquí y para la gente de aquí la Ley de Vivienda o la Ley de Fracking, pasando por encima de lo que diga Madrid», ha dicho.

«Ejercicio pactado»

Por su parte, Andoni Ortuzar ha defendido en todo momento el «ejercicio pactado del derecho a decidir» porque la «unilateralidad no debe operar» en esta materia.

El presidente del EBB del PNV ha respondido a Arraiz que se deben aprovechar los meses que quedan de legislatura en el Parlamento para alcanzar algún tipo de acuerdo. «Vamos a ver si somos capaces de ver si somos capaces de poner unas mínimas bases sobre lo que estamos de acuerdo y también sobre lo que no estamos de acuerdo». «Se acabó el esconderite, llevamos tres años así», ha añadido.

Ha considerado que en ese acuerdo debe estar el PSE, no limitarlo a los partidos propuestos por la coalición abertzale, y no esperar a que lleguen «los nuevos», en referencia especialmente a Podemos, para tratar de alcanzar un acuerdo.

«Si se niega todo, algunos pueden pensar que la solución es la independencia. Aun siendo independentistas, agunos vamos a intentar que haya un acuerdo que no satisfaga a todos, pero sí a la mayoría», indicado.

Idoia Mendia (PSE) ha considerado «marciano» el «debate entre nacionalistas» sobre cómo superar el actual estatus político «con la que está cayendo», y ha recordado que su partido propone una revisión del autogobierno «hacia adentro y hacia afuera».

Borja Sémper (PP) ha lamentado que en la política vasca «interesa más el debate victimista que el referido a cómo lo hacen quienes gobiernan. Interesa más el debate sobre la consecución imposible de una arcadia feliz antes que dar cuenta sobre cómo se gestiona el enorme potencial», ha dicho.

Gorka Maneiro (UPyD) ha afirmado que la autodeterminación en el Estado español es la competencia que tienen los ciudadanos, en su conjunto, «para cambiar la Constitución».

Ha abogado por afrontar reformas pero no para «contentar a los nacionalistas», sino para conseguir más «igualdad y bienestar entre todos los españoles».