El Grupo Vocento ha difundido el documento íntegro del acuerdo alcanzado por PNV y PSE para un Gobierno de coalición en Lakua. El último capítulo, 10 páginas de 71, es el referido al nuevo estatus para Araba, Bizkaia y Gipuzkoa y se engloba bajo el epígrafe ‘Más y mejor Autogobierno’. En él se insiste en que la redacción de la propuesta partirá de una nueva Ponencia y que se tramitará «de acuerdo con las normas y procedimientos legales vigentes, respetando el ordenamiento jurídico, los métodos democráticos y los derechos y las libertades de la ciudadanía».
El capítulo se centra, sobre todo, en reclamar las competencias no transferidas, en especial prisiones y Seguridad Social, y en denunciar el «fuerte impulso recentralizador» del Estado. Es por ello que afirma que «el Estado español precisa de una reformulación que ponga en valor el autogobierno vasco» y subraya que «una reforma de la Constitución en tal sentido ampliaría las posibilidades para mejorar y garantizar el autogobierno».
Es en las últimas dos páginas en las que hace referencia a la «Actualización del Pacto Estatutario». Confirma la conformación de una nueva Ponencia de Autogobierno que siga la senda de la iniciada en la legislatura anterior. PNV y PSE llevarán sus propias propuestas a esa Ponencia pero sí que acuerdan que el resultado deberá ser «un borrador de texto articulado que enuncie una Reforma del Estatuto de Gernika, respetando el ordenamiento jurídico». Anuncian que el borrador deberá ser redactado en ocho meses, «desde su encomienda».
Más de la mitad de este apartado corresponde a los temas en los que no hay una posición acordada y que deberán ser tratados en la nueva Ponencia. Se habla del posible «reconocimiento de Euskadi como nación», del derecho a decidir, de la reforma de la Constitución española y de las «relaciones inter-territoriales con la Comunidad Foral de Navarra y con la futura institución única que aglutinará a los territorios vascos radicados en el Estado francés».
En esa enumeración se cita, también, un «sistema concertado de garantías que impida la modificación unilateral del nuevo pacto político alcanzado». Como garantía propuso el PNV en su día una consulta habilitante previa que blindara el acuerdo alcanzado en el Parlamento de Gasteiz ante un posible portazo de Madrid, en este documento no se hace mención a ello. La única referencia a una consulta se hace en el último punto del documento en el que se afirma que una vez aprobada la propuesta «por parte de las instituciones competentes, los acuerdos que estas adopten serán sometidos a la decisión de la ciudadanía, para que se ratifique mediante referéndum».