En una entrevista concedida a RNE, Ortuzar ha considerado que se viene de una situación «compleja» porque la mayoría absoluta del PP «había atrofiado la capacidad de negociación del PP y de sus cuadros dirigentes, y ahora cuesta romper esas sinergias del pasado y también desmontar tantos años de desencuentro entre el PP y el PNV».
«Y también somos conscientes de que la situación económica no es boyante y lo mismo que nosotros hemos tenido que hacer un esfuerzo negociando nuestros presupuestos, vemos que lo tienen que hacer ellos», ha añadido.
Para el líder jeltzale, PP y PNV están todavía «distantes», pero hay «tiempo de aquí al 3 o al 4 de mayo» para acordar. «Es una pena que estemos siempre negociando al filo de la campana, pero parece que ha sido casi obligado que estas negociaciones terminen de media noche y en vísperas del día de la votación», ha manifestado.
Tras asegurar que los representantes de su formación «intentan ser unos negociadores serios», ha asegurado que, con la preparación de su enmienda a la totalidad, no pretenden ejercer «un chantaje ni una medida de presión».
«Tampoco sería estrictamente necesaria. Nosotros podríamos votar la enmienda a la totalidad de cualquier otro grupo de la Cámara que sí lo va a presentar. El trámite es una enmienda de devolución, pero el ritual exige que cada uno vaya marcando posición. A día de hoy, los presupuestos, tal y como están, al PNV no le gustan. Por lo tanto, lo más lógico es que presentáramos una enmienda a la totalidad. Las enmiendas a la totalidad se presentan y, luego, se pueden retirar», ha afirmado.
Por ello, ha indicado que ellos no le darían «un especial valor» a que el PNV enmendara a la totalidad los presupuestos. «Nuestra vocación es la de negociar hasta el último minuto y a nosotros, cuando entramos a las negociaciones, nos gusta llegar a acuerdo. No entramos a las negociaciones como una pose, pero, a día de hoy, con honestidad, tengo que decir que estamos lejos», ha indicado.
Preguntado por si cree que el PP está «débil» por los casos de corrupción que le han salpicado, Andoni Ortuzar ha señalado que, «si está débil, no se le nota». «Yo creo que están en una posición de negociación dura», ha dicho.
«A cara perro»
«Están negociando con mucha dureza y a cara perro, podría decir, porque también estarán convencidos de que es lo que tienen que hacer, como nosotros estamos negociando con mucha dureza para seguir nuestros planteamientos», ha subrayado.
A su juicio, las negociaciones presupuestarios «son un puzle» y ha apuntado que los jeltzales son conscientes de que no van a conseguir «el cien por cien» de sus pretensiones. «Pero hay que tener el mínimo suficiente para estar a gusto en la aprobación de los presupuestos y ese mínimo no lo tenemos. Hay muchas cosas pendientes, como temas de inversiones, de infraestructuras o de competitividad para las empresas que tienen que ver con el sector energético», ha señalado.
Tras asegurar que en unos temas está «más lejos» y en otros «más cerca», ha dicho que, en todo caso, todavía no han llegado a «ese umbral mínimo de satisfacción para el PNV». «El cuadro de necesidad que tiene el PP es muy superior al nuestro en el País Vasco», ha indicado, aunque ha reconocido «el esfuerzo» realizado por el PP para facilitar la aprobación de las cuentas de Lakua «y la inteligencia política» con la que actuaron.
«De estar fuera, casi casi, de los circuitos políticos de Euskadi, de estar allí en un rincón, ese movimiento en los presupuestos le ha vuelto a situar en la escena política en un puesto destacado. Fue una operación inteligente por parte del PP vasco, pero eso no nos ablanda el corazón», ha manifestado.
En esta línea, ha afirmado que los jeltzales negociarán «con mucha seriedad para sacar los presupuestos» porque le gusta que «las instituciones funcionen de manera ordenada» y las cuentas son «un elemento básico». «Pero, para eso, hay que negociar y llegar a unos acuerdos que, a día de hoy, no se han producido», ha dicho.
A su juicio, «al final, alguien tendrá que tomar una decisión política» en el Gobierno de Mariano Rajoy de «qué es mejor, llegar a un acuerdo o ir a una prórroga presupuestaria».
Ortuzar cree que «no sería bueno» un adelanto electoral y unos comicios no cambiarían el panorama «de manera tan drástica que no que lo que ahora se vive cambiara». «Creo que hay que hacer un esfuerzo de negociación», ha considerado, para emplazar a ver «si en los últimos días que quedan hay un marco suficiente».
Política carcelaria
El presidente del EBB ha asegurado que ellos han sido «muy claros» en asegurar que el PNV no está hablando en la negociación presupuestaria de política penitenciaria. «Eso no obsta para que el Gobierno español y todos los partidos del espectro español sepan cuál es nuestra posición para este tema», ha destacado.
En su opinión, «hay que dar pasos en una política penitenciaria distinta, que, desde la Justicia, desde el respeto a las leyes, etc, ayude a resolver el problema del conflicto vasco» que se va «encaminando bien».
En esta línea, ha reiterado que «no es moneda de cambio» en la negociación. «Nosotros, si no hubiera acuerdo mañana o pasado, cuando se produzca, vamos a seguir reclamando otra política penitenciaria. Nosotros no queremos pillarnos los dedos con este tema, que es suficientemente importante, muy relevante en la situación política vasca como para que nosotros lo vinculemos a una cosa tan coyuntural, aunque importante también, como son los presupuestos», ha indicado.
Según ha asegurado, «pase lo que pase con los presupuestos», el PNV seguirá «intentando convencer al Gobierno central y también al resto de partidos del Estado español de que hace falta un cambio en las políticas penitenciarias que se han traído hasta ahora, y sobre todo, que hace falta ir desmontando toda esa excepcionalidad que se fue construyendo para luchar contra una ETA que hoy ya no existe».