«Bildu pretende dar la consideración de víctima de violencia a quien sufrió un accidente de tráfico, hecho desgraciado que no deseamos a nadie pero que fue resultado de lo que fue, un accidente», ha indicado UPN en un comunicado.
Karmele Solaguren murió en 2004 cuando viajaba hasta la cárcel madrileña de Alcalá Meco, donde entonces se hallaba preso su hijo Ekain. El año pasado, el colectivo Karmele Gogoan comenzó a movilizarse para erigir un monolito en recuerdo de esta víctima de la política penitenciaria. La inauguración tendrá lugar este sábado.
Para UPN, la alcaldesa, con su respaldo, está «denigrando su cargo» porque mezcla su ideología con el papel institucional que representa, que «es de todos los vecinos y no sólo de una minoría». Además, considera que la instalación del monolito «pretende justificar la ideología que ha traído a Barañain y a Navarra tanto dolor y sangre».
Por su parte, el PP estima que «la motivación de este homenaje es puramente ideológica, como denuncia a las políticas de dispersión, tal y como ha reconocido la propia alcaldesa».