Agustin GOIKOETXEA @goikodeustu

Las asociaciones vecinales instan a Aburto a dialogar sobre la participación ciudadana

La Junta Directiva de la Federación de Asociaciones Vecinales de Bilbo remitió el pasado viernes, por vía del registro, una carta al alcalde, Juan Mari Aburto, a raíz de las discrepancias surgidas en torno al próximo Reglamento de Participación Ciudadana que va a refrendar el jueves la Corporación municipal. En la misiva, se le solicita tenga a bien «dejar sobre la mesa de trabajo el proyecto de Reglamento» y abrir desde el mes de julio un periodo de diálogo que permita llegar cuanto antes a un acuerdo socialmente satisfactorio sobre el mismo.

Los organismos ciudadanos consideran que la aprobación de esta norma en el pleno municipal del jueves, sin que se recojan en ella las alegaciones fundamentales de las 1.562 solicitudes individuales o en representación de las asociaciones, puede conducir de nuevo al «alejamiento institucional de la ciudadanía y al vaciamiento progresivo de la interlocución social» de los órganos que ahora soportan la participación vecinal.

Mencionan que ese número elevado de alegaciones se formularon en el proceso participativo que se desarrolló en 2016, criticando que las reclamaciones «fueron desvirtuadas de forma improcedente». Con la aprobación definitiva del Reglamento Orgánico y Funcionamiento de los Distritos por el Pleno, termina su tramitación y comenzará a aplicarse a pesar de la oposición de diferentes agentes.

En la carta que el presidente de la Federación de AAVV, Francisco Javier Muñoz, ha remitido a Aburto se recuerda que, en 2011, el Consistorio reconoció «a las asociaciones de vecinos y a la Federación de Asociaciones Vecinales de Bilbao por el trabajo que realizan en favor del progreso y desarrollo de la ciudad».

Además, el Ayuntamiento se comprometió a «facilitar la interlocución municipal y encauzar los deseos de participación comunitaria en fines del interés general». Para estos colectivos, este proceso de diálogo que propone en última instancia es una buena ocasión para hacer realidad lo mencionado por Aburto al comienzo de la legislatura, en el sentido de que «la puerta de mi despacho estará siempre abierta para la Federación de AAVV de Bilbao».

Desde el movimiento vecinal se afirma que quieren seguir siendo un agente activo en el desarrollo social de la villa, comprometiéndose en todos aquellos ámbitos que beneficien a Bilbo. «El acercamiento y el acuerdo son posibles –aseguran– poniendo en valor la representación social y su derecho a reflejar sus propuestas mediante el voto sin vulnerar por ellos ningún principio legal de decisión y garantizando para el debate sobre la distribución territorial de los consejos una mayor concreción de sus ventajas y dificultades».