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Udalberri propone una tasa para controlar el turismo

Udalberri ha propuesto en un comunicado implantar una ecotasa para los turistas, que contribuya a financiar los gastos públicos que genera su paso.

Las ediles de Udalberri Amaia Arenal y Carmen Muñoz.
Las ediles de Udalberri Amaia Arenal y Carmen Muñoz.

Udalberri ha manifestado que es momento de actuar y poner medidas para controlar el aumento del turismo en Bilbo.

«Es crucial que sea un impuesto municipal, local, para que el Ayuntamiento lo dedique luego exclusivamente a incrementar y mejorar los servicios y un modelo sostenible. Hay que cobrarles un impuesto que contribuya a financiar los gastos públicos que genera su paso por la ciudad y a mejorar el reparto de esa riqueza para que revierta de forma más plural en la ciudad», ha explicado la portavoz de Udalberri, Carmen Muñoz.

Udalberri ha recordado que durante los primeros cinco meses del año el incremento de pernoctaciones en hoteles ha sido de 6,7% en Bilbo, cifra que ha aumentado con la llegada del verano: se espera llegar al 90% de ocupación en agosto, y en julio se ha superado el 80%.

Para Muñoz, es necesario conocer bien el impacto del turismo: «A día de hoy el turismo en Bilbao no es un problema, como lo puede ser en ciudades como Barcelona, pero ya existen zonas en la ciudad donde se está empezando a expulsar a residentes porque las viviendas y los locales están alcanzando precios inasequibles».

En Udalberri creen además necesario exigir la lucha contra el fraude, que empobrece a la mayoría mientras una minoría se beneficia.

Amaia Arenal, concejala de la coalición ha asegurado que hay que poner límites a los «fondos buitre» y hacer que el peso de la ley caiga sobre quienes pongan pisos en alquiler sin los perceptivos registros y el consiguiente pago de tasas, impuestos y altas en la seguridad social.

«Es imprescindible limitar los establecimientos hosteleros evitando las grandes concentraciones y el destino exclusivo de los espacios de oportunidad o espacios que queden vacíos en la ciudad al monocultivo del sector turístico que, como prueban las cifras, ofrece empleos de carácter temporal, haciendo de los bajos salarios y la precariedad su característica más definitoria», ha criticado Arenal.