Cinco victorias, tres empates y, desde ayer, único equipo de la Liga imbatido. El Athletic tiene una línea clara por la que avanzar y es precisamente lo que quiere hacer en Las Palmas de Gran Canaria, prolongarla pero también mejorarla. Es decir, celebrar otro buen resultado pero intentando dar un paso adelante a nivel de juego.

No lo tendrá fácil ante un Las Palmas que respira tras conquistar su primer triunfo del curso en Málaga y que, como explica José Ángel Ziganda, tratará de «tener el control de la pelota y la iniciativa del juego a través de la circulación». Y que además tiene ahora «más recursos» tras el fichaje de jugadores «rápidos y potentes», aunque es «difícil que pierda su esencia». Un rival que tratará de poner a prueba la fortaleza defensiva de la que vienen haciendo gala los rojiblancos.

No es el único examen que quiere superar Ziganda, que también quiere «más minutos» como la primera media hora de Berlín, que le pareció «muy buena, aunque faltó el gol». «La excelencia es muy difícil de conseguir, hasta para los mejores equipos del mundo. Pero tenemos claro que debemos mejorar. La fluidez, la circulación, algo más de confianza...», aseguró, aunque recordó que «tenemos muchas cosas buenas y si estamos así no es por suerte».

La continuidad a esa primera media hora contra el Hertha la tendrán que buscar jugadores muy diferentes al de aquel partido. De hecho, cinco de los jugadores que viajaron a Alemania ni siquiera han cogido el avión esta vez. Vesga, Balenziaga, Córdoba, Aketxe y Mikel Rico, este último con molestias en el tobillo, dejan su plaza en la convocatoria a Núñez, Iturraspe, Beñat, Sabin Merino y Vesga. Los cuatro primeros podrían entrar en un once en el que apenas repetirían Laporte y Muniain respecto a ese último partido.

«Aunque no está en los focos, no nos olvidamos de Yeray»

El viernes se cumplió un año del debut de Yeray con la camiseta rojiblanca. Doce meses larguísimos, en los que al éxito le ha sucedido una dura enfermedad.

En la recta final del tratamiento de quimioterapia al que se somete desde junio, y trabajando al tiempo en Lezama, Ziganda asegura que «con la vorágine de partidos el foco está puesto en el campo pero no nos olvidamos de él y está con nosotros».

«Con mucha tranquilidad, viendo sus sensaciones en el día a día y sin prisa», asegura, pero el entrenador rojiblanco se muestra optimista de cara a la recuperación de Yeray, que «va a ser un gran apoyo para el equipo». Un equipo que «necesita gente de su nivel, tanto deportiva como personalmente», subrayó.GARA