El defensa mallorquín ha estado diez meses apartado de la competición tras la fractura de tibia y peroné de la pierna derecha producida en una acción con Isco Alarcón en el partido del pasado 11 de febrero ante el Real Madrid en El Sadar.

Tano viajó a Oviedo dentro de una convocatoria de 19 futbolistas e inicialmente iba a ver el partido desde la grada, aunque finalmente fue convocado para el banquillo y jugó los últimos minutos en el estadio Carlos Tartiere.

«Tenía esperanzas de jugar. Cuando entré en la convocatoria me vinieron un cúmulo de emociones y al jugar iba a ir a por todas», ha dicho en rueda de prensa tras el entrenamiento en las instalaciones de Taxoare.

El defensa balear ha indicado que volver a jugar era una «meta» que se había propuesto tras la grave lesión sufrida la pasada temporada en Primera División.

«Ha sido dura la recuperación, con momentos de bajón, de pensar que tenía que dejar mi profesión, que de la noche a la mañana se te va todo lo que te ilusiona. Todo ha quedado atrás y solo pienso en jugar», ha manifestado Tano, que ha dicho que el mensaje que más le emocionó tras su reaparición fue el de su mujer, quien «se puso a llorar al ver que saltaba al campo».

«No es lo mismo entrenar que jugar. Son diferentes sensaciones. Necesitaba volver a sentirme futbolista después de diez meses», ha afirmado.

Tano, que ha agradecido a sus compañeros el apoyo prestado durante su recuperación, ha indicado que se encuentra «física y mentalmente bien» y que está «disponible para lo que necesite» el entrenador.

Asimismo, ha señalado que esta experiencia le ha hecho «madurar como futbolista y persona» al «valorar más» la profesión, y por ello espera que le sirva para «crecer» como futbolista.

Sobre la marcha del equipo, que ha entrado en una mala fase de juego y resultados, Tano ha subrayado que los rivales les están «haciendo daño con poco», pero se ha mostrado «confiado» en el grupo y «convencido» de que retomarán los resultados positivos.

La plantilla rojilla se ha ejercitado en Taxoare con la buena noticia de la prácticamente recuperación total de Oier Sanjurjo, quien arrastraba molestias físicas las dos últimas semanas y no pudo jugar ante el Oviedo por sanción.

El defensa central volverá al once inicial de Osasuna en el partido del sábado contra el Numancia en El Sadar, partido para el que también estará disponible el medio centro argentino Joaquín Arzura después de las molestias en la zona lumbar durante el calentamiento en Oviedo.