Luis VILLAREJO / RAMON OROSA (EFE)

Un «Chopo» de 75 años

José Ángel Iribar, auténtica leyenda y abanderado del club rojiblanco, soplará velas este jueves.

Su ídolo fue Piru Gainza y hoy disfruta con Leo Messi. Admiró a Lev Yashin y narra que los primeros guantes ‘auténticos’ de portero se los vio al mítico Gordon Banks. En aquel entonces los guantes que lucían eran de lana. No eran guantes de verdad. Un día vio unos distintos, que se ajustaban a la mano, manoplas distintas, ideales para el contacto con el balón, con un color verde que llamaba la atención. Los lucía Gordon Banks, el mítico portero inglés que ganó el Mundial del 66. Iribar soñaba con ellos. Así que un día se fue a Londres y los buscó por todos los rincones de ‘Marks&Spencer’. Los encontró. Y fue uno de esos días felices de su vida.

José Ángel Iribar cumple 75 años este jueves. Y aún sigue de moda. No solo entre los más veteranos, sino entre los más jóvenes. Enjuto, delgado, igual de alto que siempre, con una planta impecable, Iribar cuenta que hasta los chavales le paran por Bilbao y le dicen: «¡Chopooo, máquina!». Él admiraba a Piru Gainza, Lev Yashin y hoy a Leo Messi. Nosotros a él.

Antes de llegar del Basconia al Athletic, siendo un crío, recibió ofertas del Atlético, del Barcelona y del Valencia. Y ya en su recta final, con casi 34 años, confiesa que el Real Madrid tanteó su fichaje. No hubo opción. Se jubilaba en su Athletic. «Siendo ya treintañero, en un partido de pretemporada en Mallorca se me acercó el presidente (José Antonio) Eguidazu y me dijo que tenían una oferta del Madrid, que qué me parecía. Le dije: ‘Ni lo muevas, yo estoy fenomenal aquí y me gustaría terminar aquí. Creí que lo sabías’. Y seguí jugando hasta los 37 años», recuerda a EFE en charla en las instalaciones de Lezama.

En el club de su vida. El Athletic. «El Athletic es una gran familia. Así, de verdad. Es un club que se vive en cada casa, sobre todo en Bizkaia, pero también en muchos sitios de Euskal Herria. Es segundo equipo de gente de otras muchas ciudades que tiene la diferencia de que compite durante toda su historia, que son ya 120 años, de una manera muy cercana a cuando surgió el fútbol. Y eso le da un valor añadido a lo que hace. Explicándolo así se quedarían un poco sorprendidos, pero yo les diría que vengan aquí y nos conozcan. Es la mejor manera de entender el Athletic y el sentimiento Athletic», se explaya para explicar qué es este club.

Le impresionaron Fidel Uriarte y Txetxu Rojo, «tan jóvenes, con tanta presencia en el campo y con tantas virtudes futbolísticas...»; las irrupciones de talentos como Julen Guerrero o Joseba Etxeberria, «esa gente joven que surge de manera tan espontánea, gente que ha nacido para el fútbol y lo hace muy bien»; o Johan Cruyff o Amancio entre aquellos a los que se enfrentó.

Ídolo, símbolo, abanderado, uno más entre todos, intachable. «Si alguien me reconoce y me habla, hablo con él sin ningún problema», cuenta. Quiere y se deja querer. Y por encima de todo, amor al fútbol. «Ya hay referencias de Atapuerca de que allí ya le pegaban patadas al algo... Es que el fútbol es maravilloso». Palabra de ‘Chopo’.

 

«Kepa es una de esas apariciones como Julen, Uriarte o Rojo»

«Tenemos dos porteros buenos. Uno, Herrerín, que lo está haciendo muy bien, y luego la irrupción de Kepa, que es una de esas apariciones como Julen, Uriarte o Rojo, que ya de entrada se ganan a la afición y al equipo. Y es importante ganarse primero al equipo y al entrenador», responde Iribar sobre los actuales porteros del Athletic. Kepa «tiene que ser él mismo y si puede aportar algo más –que él–, fenomenal», añade, contento de que haya renovado. «El que quiera quedarse, se queda», zanja. EFE