La designación de Carlo Cottarelli se produce tras el fracaso de Giuseppe Conte, quien contaba con el respaldo del Movimiento 5 Estrellas (M5S) y la Liga, las dos fuerzas más votadas en las elecciones del pasado 4 de marzo.

Conte rechazó ayer seguir adelante con la formación de gobierno ante el veto de Mattarella a su candidato para la cartera de Economía, Paolo Savona, un declarado detractor del euro.

Tras ello, el propio Mattarella ha solicitado a Cottarelli que intente formar ejecutivo. El anuncio lo ha hecho el secretario general de la Jefatura del Estado, Ugo Zampetti, que ha realizado un escueto comunicado en la sala de prensa del Quirinal, la sede de la Jefatura de Estado italiana, que señalaba que Cottarelli aceptaba con reservas, lo que indica que se tomará un tiempo para confirmar el cargo.

Se trata del nombramiento de un tecnócrata para que forme un Gobierno de transición con objeto de ocuparse de los temas más urgentes, así como para reformar la ley electoral. Aunque será difícil que este «Gobierno del presidente», como es denominado, consiga superar el voto de confianza en el Parlamento, ya que tanto la Liga como el M5S, al igual que Forza Italia de Silvio Berlusconi, han declarado que no le votarán. Cottarelli ha explicado que si su Ejecutivo no logra la confianza del Parlamento, habrá nuevas elecciones después del mes de agosto.

Cottarelli es actualmente director del Observatorio sobre las Cuentas Públicas de la Universidad Católica de Milán.

Fue director del Departamento de Asuntos Fiscales del Fondo Monetario Internacional (FMI) hasta que en 2013, el entonces jefe de Gobierno, Enrico Letta, le nombró comisario para implementar un plan de reducción del gasto público. Un cargo que conservó hasta el nombramiento de Matteo Renzi como nuevo primer ministro.