Luis Miguel PASCUAL / EFE

Ibarrondo, el vasco de la «Tri»

El entrenador personal del combinado mexicano, y que se incorporará a la Real tras el Mundial, alaba el liderazgo de Juan Carlos Osorio.

A la sombra de Juan Carlos Osorio, el seleccionador colombiano que ha devuelto la esperanza a México, trabaja Imanol Ibarrondo, un entrenador personal, clave en la clasificación de la ‘Tri’ para octavos de final y que ahora tiene la función de programar al equipo para ganar a Brasil. Desde hace dos años, este bilbaino colabora con la selección mexicana para poner a los jugadores en las mejores condiciones mentales para afrontar sus partidos. Osorio no ha parado de loar su aportación, pero, modesto, asegura que apenas llega «al 1%" del mérito, mientras que "el 99% es de técnico y jugadores». Ibarrondo es desde hace unos días integrante del cuerpo técnico de Asier Garitano en la Real Sociedad.

Tras haber trabajado duro para atenuar la euforia que siguió a la victoria contra Alemania en el debut, ahora su esfuerzo se centra en minimizar la pérdida de confianza que supuso la derrota contra Suecia, para afrontar en las mejores condiciones el duelo contra los brasileños. «Nos reuniremos para procesar las emociones tras una derrota decepcionante. El último partido marca el estado emocional y hay sensaciones de pena, decepción, tristeza, enfado. Hay que dejar surgir eso y convertirlo en el mejor estado para afrontar a Brasil», asegura.

Así viene trabajando con la ‘Tri’ desde hace un par de años, «un reto personal duro» en un país que, asegura, «vive el fútbol, y la vida en general, con una especial pasión». Ibarrondo explica que «tanta pasión no es una virtud, puede mutar en obsesión. Es un tsunami emocional. No es fácil equilibrar eso, las victorias y las derrotas. Somos campeones del mundo sin jugar y de buenas a primeras somos los peores. Hay que desdramatizar», aclara.

Sobre los liderazgos

Ibarrondo asegura que México «es un equipo maduro, experto, ambicioso, sereno y con ganas de hacer bien las cosas», por lo que confía en sus opciones de alcanzar cuartos. Tras la figura de Rafael Márquez, sostiene, el vestuario carece de un liderazgo personal, pero tiene «varios, en función de los momentos y todos volcados al bien del equipo». En ese sentido, «no creo en liderazgos autoritarios, hay diferentes líderes, en función de las situaciones, líderes que se ponen al servicio de los demás».

Ahora, espera que la aventura con México llegue lo más lejos posible y para ello cuenta con una selección «muy comprometida» con su seleccionador. «El líder de este equipo es Juan Carlos Osorio, es quien les inspira, les motiva, les hace creer. Les da confianza por su forma de afrontar las situaciones, los problemas, de apoyarles siempre, de exigirles también», señala. Menciona sus constantes rotaciones, muy criticadas por la prensa pero que «les demuestra que cuenta con todos». Y es por ello que «han decidido comprometerse con él, les cree y le siguen. El responsable de que este equipo esté en octavos de final, con todas las opciones de ganar a Brasil y de pasar a cuartos es Juan Carlos Osorio», ratifica.

En las manos de Osorio cayó el libro ‘‘La primera vez que la pegué con la izquierda’’, firmado por Ibarrondo, lo que acabó con este vizcaino en el Mundial, un esfuerzo «mental y humano» tan duro que duda que repita.

 

Ya saben lo que es ganar a Brasil

Mexicanos y brasileños se las verán el lunes en unos octavos de final donde los segundos son siempre favoritos pero los primeros ya saben lo que es ganar al gigante ‘canarinho’. México venció a la Brasil de Neymar en una final olímpica, venció a la Brasil de un joven Ronaldinho en una final de Confederaciones, venció a Brasil en una final de Copa Oro y le sacó un empate a Brasil en su Mundial. ¿Quién es el favorito? Los centroamericanos tienen mucho que ganar, a pesar de las dudas tras ese tropiezo de última hora ante los suecos. Es más, tienen la posbilidad de lograr algo que solo han hecho en la historia de los Mundiales las selecciones de Hungría e Italia, como es ganar en la misma Copa del Mundo a alemanes y brasileños, como se ve, al alcance de casi nadie. En 2014, en Brasil, se vieron por última vez las caras y aquel duelo acabó sin goles gracias al portero Guillermo Ochoa. Al de Guadalajara le tocará repetir esa actuación.J.VIVANCO

 

Iniesta palpa «un pesimismo excesivo»

Andrés Iniesta, segundo capitán de la selección española, transmitió la preocupación que tiene por palpar «un pesimismo excesivo» por la imagen de España, y consciente de que se «debe mejorar», dejó claro que «los primeros críticos» son los propios jugadores.

 

Los alemanes se disculpan y asumen la derrota

«Vuestro apoyo fue maravilloso, en Alemania y en los estadios rusos. En Río, en 2014, celebramos juntos. Pero al deporte también pertenecen las derrotas y reconocer cuando los adversarios han sido mejores», se disculpó el equipo alemán en una carta. «Estamos tan decepcionados como vosotros».