Hasta pasada la medianoche de ayer no se conocieron los resultados de la votación de la masa social rojilla sobre el futuro estadio que desea. Con una participación «histórica» –así la describió la entidad osasunista– del 75,6% (8.409 papeletas de los 11.118 socios que tenían derecho a votar), el deseo mayoritario es que El Sadar cambie de cara de una manera profunda.
La posible nueva imagen del feudo rojillo llevará la marca Muro Rojo, un proyecto impulsado por el despacho de arquitectos OFS y que sería construido por VDR. Se trata de la opción con mayor capacidad de asientos –llegarían hasta los 25.048– y que ampliará todo el anillo de gradas del campo, a excepción de la Tribuna Alta, elevando once filas más de asientos.
Hay que destacar la solución aportada para la zona de Graderío Sur, donde se aplicaría el sistema rall-seat, utilizado en el campo del Borussia Dortmund, que permite a los espectadores ver el partido de pie, pero con un sistema anti avalanchas mediante la colocación de barandillas. La estética del estadio sería vertical, con una inclinación de 40 grados en sus gradas, cubiertas cerradas en todo el perímetro, una distribución más espaciosa de las localidades, mejoras en la evacuación y locales para ser aprovechados con fines comerciales.
Jaime Suescun, de OFS, y Héctor Morales, de VDR, han sido los encargados de comparecer en la sala de prensa de El Sadar, junto al presidente de Osasuna, Luis Sabalza, para expresar su satisfacción por el hecho de haber sido elegidos y anunciar que el posible inicio de los trabajos se llevaría a cabo una vez finalizada la temporada deportiva.
Han destacado, asimismo, de su proyecto la valoración que han realizado del interior, potenciando un Sadar «reconocible, genuino y atronador», el equilibrio entre actuaciones y coste material, además de dar una solución «coherente» a la reforma, aspectos que han considerado han sido tenidos en cuenta por las socias y socios.
«Nuestra idea del nuevo estadio ha estado siempre en función de que ayude a empujar más en los partidos y que los asistentes se encuentren más cómodos», han remarcado, a la par que han reconocido que será necesario realizar algunas reubicaciones, si bien los aficionados podrían disponer de »una mayor oferta de localidades con mejor visión».
Pendientes de la asamblea
Todo queda pendiente de lo que suceda este próximo sábado en la asamblea extraordinaria de socios compromisarios, donde la junta directiva tratará de buscar su apoyo mayoritario para autorizar que el club negocie un préstamo de cara a acometer la reforma integral. Hay que recordar que según los actuales estatutos, es necesaria la aprobación de dos tercios de dicha asamblea. Sabalza se ha mostrado «optimista» al respecto, después de que el 90% de la masa social se inclinase a favor de la remodelación profunda del estadio. «Salvo el incidente de los presupuestos, siempre han apoyado la labor transparente y honrada que ha llevado a cabo esta junta directiva», ha expuesto.