Según ha informado la Policía española, la investigación se inició al detectarse desde el mes de marzo un aumento significativo de robos con fuerza en establecimientos, por lo que se estableció un dispositivo preventivo.

En este caso, los hechos ocurrieron en la madrugada del 7 de marzo, cuando tres varones forzaron la persiana y la puerta de entrada de una cafetería del centro de Iruñea, y ya en el interior sustrajeron el cajetín de la caja registradora y algunas consumiciones.

Una vez cometido el delito, la víctima presentó una denuncia ante la Policía españolal, cuyos agentes, tras la inspección ocular en el lugar de los hechos y las gestiones de investigación, consiguieron identificar a los presuntos autores.

Estos fueron localizados, detenidos y trasladados a dependencias policiales para la práctica de diligencias.

Uno de los investigados, pese a ser mayor de edad, había cometido el delito siendo aun menor de edad, por lo que la Fiscalía de Menores dispuso que fuera entregado a sus padres.

Los otros dos detenidos, mayores de edad, fueron puestos a disposición del Juzgado de Instrucción de Guardia de Iruñea una vez terminado el correspondiente atestado policial.