En un acto celebrado en Etxabakoitz, Buil ha llamado la atención sobre un «tema muy candente, la brecha territorial» para apuntar a continuación que las infraestructuras deben servir para aminorarla.
En ese sentido ha defendido, un plan que contempla inversiones en «las infraestructuras ferroviarias que ya tenemos, que puedan transportar mercancías, llevarnos más allá de España a Europa y que plantee como eje central la sostenibilidad y precios económicos».
Al respecto, «frente al TAV que plantea un despilfarro económico según nos está diciendo Bruselas en el que paga el común de los mortales y solo lo usa el 5 %», a lo que además se suman «grandes casos de corrupción», ha apostado por una estructura ferroviaria «moderna, ecológica y accesible» para todos los ciudadanos.