Los jeltzales fueron la fuerza más votada pero empataron a 3 concejales con los independentistas. El séptimo concejal era del PSE y se supone que en lugar de votar a la candidata del PNV votó a la de EH Bildu. Ahora, el PNV ha decidido llevar el asunto a los tribunales argumentando que en la papeleta no ponía el nombre de Garmendia, sino EH Bildu.

La única sorpresa de la constitución de ayuntamientos en la CAV se produjo el pasado sábado en esta localidad de Rioja alavesa, cuando se supone que el único concejal del PSE, en lugar de votar al PNV, como le comprometía el pacto global entre ambos partidos, desequilibró la balanza dando su apoyo a Pili Garmendia, de EH Bildu.

Los jeltzales fueron la fuerza más votada pero empataron a tres concejales con los independentistas. El desempate estaba en mano del concejal Eduardo Pascual, independiente en la lista del PSE. Y no votó como estaba previsto en el pacto PNV-PSE.

Desde el mismo momento de la votación, la dirección alavesa del PSE trató de contactar con Eduardo Pascual, pero aseguran que no lo lograron. Al final le enviaron un burofax.

Para tratar de recuperar la alcaldía que consideran suya, el PNV ha recurrido a los tribunales. Afirma que en la votación celebrada en el pleno del pasado sábado en el Ayuntamiento de Samaniego, una de las papeletas, en lugar del nombre de Pili Garmendia, llevaba escrita la sigla de EH Bildu. Los jeltzales aseguran que ese voto debe ser declarado nulo y la alcaldía otorgada a la jeltzale Estela Larrea como candidata más votada en las elecciones.