El alcalde de Iruñea ha dejado claro que no ve con buenos ojos este espacio y, ante esta situación, la respuesta de Herri Sanferminak ha sido clara: «Sabemos que al régimen no le gusta aquello conseguido con el esfuerzo del pueblo y que no tenga como objetivo acumular capital. Les decimos que seguiremos luchando por unas fiestas para el pueblo, culturales, diversas, anticapitalistas, feministas, participativas, ecologistas y euskaldunas». Ante las amenazas, la plataforma asegura tener el «apoyo del pueblo».

Se han sacado 560 turnos al público, de los cuales 197 todavía no están cubiertos. De seguir así, habrá días en los que no puedan servirse comidas y tenga que cerrarse la barra. Por ello, Herri Sanferminak ha querido realizar un llamamiento a todas las personas que todavía no se han apuntado y a aquellas que están dispuestas a hacer un segundo turno: «Es necesaria la aportación de todos y todas para sacar estos 9 días adelante». También hacen falta voluntarios para realizar el montaje y el auzolan, que se llevará a cabo mañana y tarde hasta el comienzo de los San Fermines. Por ello, hay llamamiento todos los días a las 08:00 de la mañana y a las 16:00.

Este año, el chupinazo se lanzará a las 14:30 junto a la gente del Gaztetxe Maravillas, con el objetivo de remarcar la importancia de los espacios autogestionados. De este modo, han querido mostrar su apoyo al Gaztetxe de Errotxapea que ha prestado su espacio para poder pintar la decoración de Herri Sanferminak. En la Plaza de la O se inaugurará el Txoko Ekologiko, un espacio propio con producto local. Ésta no será la única novedad: la música en directo acabará antes para aportar positivamente a las condiciones de descanso del vecindario. «A favor de un Alde Zaharra para vivir».

Finalmente, Herri Sanferminak ha insistido en que están trabajando por unas fiestas seguras y libres de agresiones sexistas. «En caso de agresión, sea de intensidad alta o baja, se activará el protocolo», han avanzado.