Txisko FERNÁNDEZ
DONOSTIA

El crecimiento del empleo continúa acompañado de la precariedad

El número de desempleados en Hego Euskal Herria continúa descendiendo mes a mes desde que comenzó este 2019. En sentido contrario se mantiene la evolución de la cifra de personas afiliadas a la Seguridad Social. Y es en el capítulo del empleo en el que se centran las valoraciones negativas de los sindicatos ante el actual escenario.

El aumento del empleo –hasta 1.262.628 personas estaban afiliadas en el mes de junio– ha dejado el número de las desempleadas en 141.719 tras la quinta caída mensual consecutiva.

Esto supone que la tasa de paro de Hego Euskal Herria ha quedado en el 10,54% de la población activa teniendo en cuenta la EPA del primer trimestre. Gipuzkoa (8,58%) y Nafarroa (9,83%) ya se mueven por debajo del listón del 10%, del que todavía se encuentran lejos Bizkaia (11,87%) y Araba (11,54%).

Como se observa en el gráfico anexo, el descenso del paro en términos mensuales ha llegado impulsado, sobre todo, por el sector servicios y, en menor medida, por el grupo de gente sin empleo anterior.

«Desprotección»

En su valoración de los datos registrados en las oficinas de empleo en junio, LAB destacó que 98.360 personas desempleadas no reciben ningún tipo de prestación por desempleo en Hego Euskal Herria, y el 60% de ellas son mujeres.

«Se trata de un colectivo expulsado del mercado laboral, abandonado por el sistema español de protección frente al desempleo, y empujado a la pobreza y a la exclusión social», subrayó la central abertzales. Y advirtió de que las rentas de garantía establecidas a nivel autonómico, «de cuantía inferior al umbral de la pobreza», constituyen la «última de red de seguridad» para estas personas.

En concreto, señaló que los datos facilitados por el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) indican que 60.993 personas son beneficiarias de las prestaciones que gestiona este organismo, aunque «en el 43% de los casos se trata de prestaciones de carácter asistencial y su cuantía no supera los 430 euros mensuales». Esos datos corresponden a los de mayo, que son los últimos publicados.

Por su parte, UGT Euskadi destacó que, aunque el número de desempleados bajó el mes pasado en 2.530 personas en la CAV, la calidad del empleo sigue «siendo pésima» y el mercado laboral vasco es «más precario que el estatal». Precisó que apenas 26.755 (un 24%) de los 111.343 parados registrados tienen derecho a la prestación por desempleo contributiva, lo que se produce porque «no generan suficiente tiempo trabajado para tener derecho a dicha prestación». Añadió que quienes cobran algún tipo de prestación son 46.430, un 41%, mientras en el conjunto del Estado la tasa de cobertura es del 60%.

También CCOO de Nafarroa alertó de que, si bien los datos publicados ayer constatan una bajada del desempleo en junio en este herrialde, «no todo son buenas noticias», al apreciar una «baja calidad de la contratación y del empleo generado» por su alta precariedad.

Así, un 94,3% de los contratos que se firmaron en Nafarroa fueron temporales; un 30% de las contrataciones se hicieron a tiempo parcial; y 2 de cada 3 de estos contratos a tiempo parcial fueron firmados por mujeres.

Desde el bando empresarial se valoraron los datos con otra perspectiva. Por ejemplo, Confebask remarcó que la CAV ha alcanzado «el mejor nivel de empleo desde octubre de 2008, prácticamente en los máximos previos a la crisis».

Y la consejera de Empleo del Gobierno de Lakua, Beatriz Artolazabal, puso el foco en que la reducción del desempleo de larga duración en junio (-1,8%) evidencia que «la recuperación económica está dando oportunidades a las personas paradas más cronificadas».