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Los toros de La Palmosilla se estrenan con un encierro rapídisimo y numerosas caídas

El penúltimo encierro de estos sanfermines ha mantenido la tónica de los anteriores con una velocidad muy alta, pero que, a diferencia del resto de días, ha estado encabezado por los toros en lugar de los mansos. La velocidad y la gran cantidad de corredores han provocado numerosas caídas.

Los toros han encabezado la manada de La Palmosilla. (Joseba ZABALZA / FOKU)
Los toros han encabezado la manada de La Palmosilla. (Joseba ZABALZA / FOKU)

La ganadería gaditana de La Palmosilla ha sido la protagonista del séptimo y penúltimo encierro de los sanfermines. Una jornada en la que la afluencia de público ha sido mayor, como era de esperar, en fin de semana.

Los debutantes han protagonizado el encierro más rápido de este 2019, con apenas 2 minutos y 12 segundos. Sin embargo, a diferencia de otros días, la manada ha estado encabezada por los toros. Hay que recordar que durante las pasadas jornadas varios corredores se han quedado de la velocidad de los mansos, que impedían acercarse a los toros.

El primer balance de heridos ha dejado dos ingresos debido a traumatismos craneales, pero no ha habido que lamentar heridas por asta. Otras dos personas han sido atendidas con heridas más leves. Como «el más tranquilo de estos sanfermines a nivel sanitario» lo ha calificado el subdirector de urgencias del Complejo Hospitalario de Nafarroa, Tomás Belzunegi.

En la cuesta de Santo Domingo se han comenzado a despejar las incertidumbres sobre esta ganadería. En los primeros metros los toros han cogido velocidad y a diferencia de lo que suele ser habitual han comenzado a situarse en cabeza llegando a rebasar a los cabestros.

En pocos metros dos astados lideraban ya el grupo y a ellos se han sumado un tercero y posteriormente un cuarto, que han atravesado sin mayores incidencias la plaza Consistorial y se han dirigido hacia la curva de Mercaderes que han superado sin problemas pese a que uno de ellos ha llegado a resbalar, pero sin llegar a caer.

En la Estafeta el grupo se ha estirado lo que ha permitido a los corredores introducirse entre las astas, propiciando bonitas carreras, pero también numerosas caídas debido a la velocidad que los bureles han impuesto.

De la misma forma, rápidos y sin fijarse en los corredores, se han dirigido hacia Telefónica y han atravesado el callejón de la plaza de toros, entrando en chiqueros en un tiempo récord en lo que va de fiesta.