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A trump no le gusta el impuesto digital de París a las tecnológicas como Google y Facebook

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha anunciado «acciones recíprocas substanciales sobre la estupidez de Macron en breve» por la imposición de la tasa sobre los ingresos de los servicios digitales de las grandes tecnológicas estadounidenses, como Google y Facebook. Su enfado ha quedado, nuevamente, recogido en Twitter.

Macron y Trump, durante la reunión del G7 en Chantilly. (Brendan SMIALOWSKI / AFP)
Macron y Trump, durante la reunión del G7 en Chantilly. (Brendan SMIALOWSKI / AFP)

Como la mayoría de anuncios que realiza el mandatario estadounidense, el aviso de sanciones a París ha llegado también a golpe de tuit. «Francia acaba de imponer un impuesto digital a nuestras grandes compañías de tecnología estadounidenses. Si alguien les cobra impuestos, debe ser su país de origen, EEUU. Anunciaremos acciones recíprocas substanciales sobre la estupidez del (presidente francés Emmanuel) Macron en breve», ha prometido Donald Trump en Twitter.

«¡Siempre he dicho que el vino americano es mejor que el vino francés!», completa su reflexión el presidente estadounidense.

La amenaza de Trump responde a la conocida como tasa GAFA (por Google, Apple, Facebook y Amazon), que fija una imposición del 3% sobre la facturación del negocio digital de esas empresas para obligarles a pagar impuestos en el Estado francés por los beneficios que obtienen gracias a sus internautas.

Ese impuesto afecta a las compañías cuyos ingresos anuales superan los 750 millones de euros a nivel mundial (unos 845 millones de dólares), de forma que unas 30 empresas podrían verse afectadas, la mayoría estadounidenses, aunque la lista también incluye a firmas chinas, británicas y alemanas.

A principios de este mes, la Oficina del Representante de Comercio Exterior, la agencia de EEUU responsable de la política comercial, ya anunció el inicio de una investigación por esta tasa a las tecnológicas al considerar que se dirige «injustamente» contra los gigantes estadounidenses.

La Oficina del Representante de Comercio Exterior abrió la investigación amparándose en la misma cláusula legal que llevó a al guerra arancelaria entre Washington y Pekín.

París intentó sin éxito que la Unión Europea adoptara un impuesto digital y ha anunciado que renunciará al suyo cuando se ponga en marcha una alternativa internacional.