Los sospechosos habrían llegado al aeropuerto de Guarulhos en una camioneta negra con distintivos que se asemejan a los de la Policía Federal de Brasil, según las imágenes de seguridad.

Cuatro hombres se bajaron del vehículo con la cara cubierta, al menos uno de ellos portando un rifle, y se encararon con varios trabajadores del aeropuerto, que posteriormente procedieron a llenar la camioneta con el botín.

Un informe policial señala que los ladrones se fueron con unos 750 kilos de oro y otros metales preciosos, así como con dos trabajadores del aeropuerto a los que cogieron como rehenes. Los ladrones aún no han sido detenidos. La carga robada está valorada en más de 30 millones de dólares, señalaron fuentes de la Policía Civil del estado de Sao Paulo.

Una portavoz del aeropuerto ha aseverado que nadie resultó herido durante el asalto.