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Calvo se desdice en el Congreso: «Nadie ha dicho que esté prohibido rescatar»

La afirmación de la vicepresidenta española, Carmen Calvo, de que el Open Arms no tenía permiso para rescatar levantó una polvareda que ha hecho reabrir el Congreso, en agosto, para una sesión monográfico al respecto. Calvo se ha desdicho, entre críticas de las bancadas de izquierda.

La vicepresidenta Calvo, en un acto militar reciente. (Cristina QUICLER | AFP)
La vicepresidenta Calvo, en un acto militar reciente. (Cristina QUICLER | AFP)

La vicepresidenta en funciones del Gobierno español, Carmen Calvo, ha sostenido este jueves que nadie del Gobierno «ha dicho que esté prohibido rescatar en ningún sitio» y ha sentenciado que «ni una sola vez» ha dejado a un barco cercano o con bandera española «sin ofrecimiento de ayuda».

Ha comparecido en el Congreso para dar cuenta de su gestión de la crisis del Open Arms, sobre el que dijo hace unos días que no tenía «permiso para rescatar» y que «nadie está a salvo» del cumplimento de la ley, incluido «un barco como este».

«No es extraño que quien tiene responsabilidades de Gobierno no solamente cumpla las normas, las haga cumplir y además lo tenga que decir, porque en este asunto hay una concurrencia de responsabilidades, de todos», ha zanjado la vicepresidenta.

Buena parte de la culpa la ha dirigido al barco de la ONG catalana, reprochándole que se negó a ir a Algeciras, una oferta que en realidad el Gobierno le trasladó casi tres semanas después de los rescates. Calvo ha intentado poner el foco en la actitud posterior del Ejecutivo, cuando al Open Arms «le envía un mensaje de este tenor: ayuda, avituallamiento, combustible, puerto más cercano si Algeciras está lejos, escoltado por el buque de la armada para más tranquilidad dadas las condiciones».

«Nadie puede confundir al Gobierno de España con la posición del de Italia a través de Salvini. Salvini cierra los puertos, denosta a los inmigrantes y es lo contrario de lo que representa este Gobierno», ha añadido Calvo en tono de queja.

Podemos, PP y Cs

La portavoz de Unidas Podemos, Noelia Vera, ha respondido a Calvo que «lo único ilegal en todo este asunto es dejar morir a personas en el mar» que, a su juicio, es lo que hizo el exministro Jorge Fernández Díaz (PP) al «lanzar las pelotas de goma en el Tarajal para que nunca llegaran».

Desde la derecha, Cayetana Alvarez de Toledo (PP) ha reprochado al PSOE «hacer negocio electoral» con este asunto, mientras Ciudadanos ha criticado lo que entiende como «improvisaciones» que «benefician a las mafias». Para Inés Arrimadas, la gravedad del asunto es tal que debiera haber comparecido Pedro Sánchez.

PNV y EH Bildu

Por lo que respecta a los grupos vascos, Mikel Legarda, del PNV, ha incidido en la necesidad de una política de la UE «que equilibre la inmigración entre los distintos miembros», en la línea de la propuesta Share que está trasladando el Gobierno Urkullu.

Desde EH Bildu, Oskar Matute ha parafraseado a José Saramago para remarcar la «ceguera» que supone invisibilizar todas estas muertes en el Mediterráneo. Y ha tomado la palabra a Calvo para poner de manifiesto que en realidad los hechos del Gobierno español y el italiano no están siendo tan diferentes.