En un artículo publicado en su blog, Arnaldo Otegi ha trazado un análisis que concede gran relevancia a la sentencia del Supremo contra el «procés», que entiende como colofón de lo que denomina, en mayúscula, «Contrarreforma Autoritaria» para salvar el Régimen del 78.

«El 155 como amenaza (que ha venido para quedarse y no solo contra Catalunya) sustituye al ‘ruido de sables’» de la transición, apunta Otegi. Con esta sentencia ve que «se cierra el círculo», dado que «ahora ya sabemos que poner urnas para que nuestros pueblos decidan será respondido con la guerra económica, la represión, la suspensión de nuestras autonomías y largas penas de prisión. Esta es la alternativa de un Estado al que todavía algunos medios de comunicación o dirigentes políticos se atreven a calificar, con absoluta desfachatez, como un Estado de Derecho».

Otegi añade otro elemento: «Los efectos de una nueva recesión económica que volverá a caer sobre los hombres de los trabajadores y trabajadoras de nuestros pueblos y del conjunto del Estado», con lo que vaticina que «el cóctel involucionista está servido».

Una situación grave con «riesgos y oportunidades»

¿Qué hacer ante ello?, se pregunta el coordinador de EH Bildu. Y responde: «En primer lugar, ser conscientes de la verdadera naturaleza y gravedad de la coyuntura que nos toca enfrentar», lo que pasa, concreta, por «decir la verdad» a la gente e «interiorizar los riesgos y las oportunidades de la situación».

«Hay que apelar a la responsabilidad de todos y a la necesaria unidad de acción sobre la base de construir programas de mínimos que sumen a las grandes mayorías sociales y populares en Euskal Herria. La defensa del derecho de autodeterminación, el antiautoritarismo, junto con la defensa de la libertad de los presos y de políticas económicas y sociales al servicio de las mayorías populares, son imprescindibles en esta coyuntura histórica. Sobran sectarismo y actitudes de auténtico infantilismo político en la defensa de este programa de mínimos», apostilla.

«Hay que sincronizar las agendas con Catalunya, sumar esfuerzos (cada uno con su ritmo) porque juntos somos más y somos más fuertes», sigue Arnaldo Otegi. «Necesitamos reforzar nuestra alianza con ERC y con el conjunto de las fuerzas soberanistas –dice por lo que respecta a EH Bildu–. Necesitamos hacer frente juntos a este escenario de involución desde la defensa de un programa de mínimos. Y hay que apelar a la movilización popular», concluye, recordando tanto la manifestación de Gure Esku Dago este sábado en Donostia (17.30, Antiguo) como las elecciones del 10 de noviembre.