La sentencia del Supremo ha establecido un duro castigo de cárcel para quien impulse referendos como el del 1 de Octubre, pero no ha amilanado al independentismo catalán, que en el Pleno del Parlament ha expresado hoy por boca el president Torra que «habrá que volver a poner las urnas» y ha dicho que eso debe ocurrir esta misma legislatura, iniciada en diciembre de 2017, por lo que tiene un marco temporal de algo más de dos años.
«Todos tenemos que hacer este esfuerzo y asumir este compromiso. Esta legislatura, si todos lo hacemos posible, tenemos que poder finalizarla validando la independencia», ha dicho.
«Si por poner las urnas por la autodeterminación nos condenan a 100 años, la respuesta es clara: Se tendrán que volver a poner las urnas por la autodeterminación», ha afirmado el president.
Antes de hacer ese anuncio, Torra se ha autoinculpado en apoyo a sus compañeros condenados por el Supremo: «Si han sido declarados culpables, yo también lo soy, y por ello he decidido autoinculparme. Yo también soy autor de este falso delito que se les han imputado», ha destacado en su comparecencia.
Además, ha apelado de nuevo al presidente del Gobierno español en funciones, Pedro Sánchez, a «encarar el conflicto como lo hacen las democracias, hablando y dando la voz a la ciudadanía».
«Ni la unidad de España ni la independencia de Catalunya pueden servir como excusa para vulnerar los derechos de la población y de los representantes políticos», ha subrayado.
Apelación a Sánchez
En el discurso de Torra también ha habido espacio para analizar las relaciones con Moncloa y ha recordado que después de la sentencia el Govern volvió a apelar «inútilmente» al diálogo con el Gobierno en funciones de Pedro Sánchez.
«Pese a la negativa reiterada del Estado siempre hemos estado dispuestos a dialogar y a hablar de resolver políticamente, apelo de nuevo al presidente Sánchez a encarar el conflicto político como lo hacen las democracias: hablando y dando voz a la ciudadanía», ha seguido.
«Tenemos que vivir en la verdad y no en los miedos ni las amenazas. El TC pretende que la cámara donde reside la soberanía los catalanes no puedan hablar de derecho a la autodeterminación», ha sido otro de los pasajes de su intervención.
Consell de la República y Debate Constituyente
A partir de ahí, Quim Torra ha esbozado una hoja de ruta que incluye la internacionalización de lo que ocurre en Catalunya, algo que basa en el denominado 'Consell de la Republica', «con el presidente (Carles) Puigdemont al frente, que es una entidad valiosísima y su papel tiene que ser capital; algo que se ve cuando convoca la asamblea de cargos electos».
También ha calificado de fundamental aprobar los Presupuestos de la Generalitat 2020 para que sean «palanca de cambio social"»y ha destacado otras herramientas que asegura que ya están en marcha como el Debate Constituyente.
El presidente ha explicado que ese Debate Constituyente, a través del cual el Govern quiere que los ciudadanos que participen dibujen la Catalunya del futuro, tiene una «participación altísima» y espera tener su primera propuesta en la primavera de 2020.
Calvo: «Hay un límite, el Código Penal»
Nada más conocer esta declaración, mientras participaba en un programa de Antena3, la vicepresidenta española, Carmen Calvo, ha respondido a Torra con la amenaza judicial previsible.
«Hay un límite a partir del cual está el Código Penal, esa es la piedra angular de la democracia», ha dicho Calvo.
«El relato que hace Torra es una fantasía de su cabeza y del independentismo», ha añadido.