Estados Unidos ha notificado oficialmente este lunes a la ONU su salida del Acuerdo de París sobre el clima, decidida en 2017 por el presidente Donald Trump.

El secretario de Estado, Mike Pompeo, ha comunicado a Naciones Unidas la decisión, un paso clave en el proceso de abandono del acuerdo que la Administración Trump no ha podido dar antes en razón de una cláusula recogida en el texto.

La comunicación oficial da inicio a una cuenta atrás de un año para que Washington efectivamente se desvincule del Acuerdo. «La retirada será efectiva un año después de la notificación» dirigida a la ONU, ha confirmado Pompeo en un comunicado. Es decir, el 4 de noviembre de 2020, al día siguiente de las elecciones presidenciales en Estados Unidos, en las que Donald Trump aspira a un segundo mandato.

«El nuestro es un modelo realista y pragmático», ha añadido el máximo responsable de la Diplomacia estadounidense.

El Acuerdo de París, adoptado también el 4 de noviembre de 2016 en la cumbre climática COP21 celebrada en la capital francesa, establece un plan de acción mundial para limitar el calentamiento global. Los países firmantes se comprometen a mantener el aumento de la temperatura mundial por debajo de 2º C y a tratar de que no sea superior a 1,5º.

Empezará a aplicarse en 2020 y  Estados Unidos lo ratificó el 3 de setiembre de 2016 pero su Gobierno anunció a la ONU su retirada el 5 de agosto de 2017, una petición que no ha podido formalizarse hasta hoy.

El artículo 28 del Acuerdo de París estipula que un Estado miembro puede retirarse a partir del 4 de noviembre de 2020, siempre que su Gobierno envíe una notificación formal a la ONU un año antes de esa fecha.

La Administración de  Trump anunció que tenía la intención de retirar a Estados Unidos del Acuerdo de París tan pronto como fuera legalmente posible por considerar que imponía una carga económica insoportable para su país.