Los primeros visitantes, siempre tímidos y curiosos, se pasean por los stand de Landako despacio. Observan los libros y discos, colocados con mimo y cuidado. Es en la segunda vuelta cuando empieza la fiesta. No hay pautas: algunos extraen del bolsillo de la chaqueta –o abrigo, que no hay Azoka en la que nos podamos desprender de él– la lista de discos y libros a comprar, y otros repasan en su mente lo que ha llamado su atención. Es entonces cuando vuelven a ojear el material, y a comprar.

Ambos perfiles, los que vienen con las etxekolanas hechas y los que se dejan llevar, se han dejado caer por el stand de GARA. «Era de esperar», nos cuenta Jabi desde el otro lado del stand, en referencia al interés que están mostrando los y las visitantes por ‘500 azal / portadas. 1977-2019. Egin-Euskadi Información-GARA’, edición que repasa cuarenta años de historia Euskal Herria mediante las portadas de los citados diarios. También atraen miradas las láminas de artistas vascos que se han sumado a la campaña para hacer frente al #ExpolioGARA: nueve serigrafías originales realizadas por artistas de la talla de José Luis Zumeta, Dora Salazar o Juan Gorriti, entre otros. Hay también hay quien ojea ‘La última entrevista con la dirección de ETA’, editada junto a Txalaparta y firmada por Iñaki Soto, que llega en su versión en castellano (la obra original, en euskara, vio la luz en 2018).

Auritze es de las primeras en llegar. Ha venido directamente al stand y se ha hecho con un ejemplar de ‘500 azal / portadas’. Es del clan de los visitantes que vienen con las ideas claras desde casa. «Lo he comprado porque soy profesora y me parece que es un material muy interesante para trabajar en clase, sé que le sacaré provecho», nos asegura, destacando tanto el valor histórico de la edición como la labor educativa que puede derivar de ella.

En la otra punta del stand divisamos a Maite. Ojea las láminas de los artistas. Se interesa por ellas. Conversa con Jabi, y este le aclara todas sus dudas. «Sí que me llevaré una, hasta sé dónde la voy a poner», nos asegura, y opina que, además de llevarse un obra de arte «preciosa» a casa, la compra porque «creo que siempre hay que actuar ante la injusticia».

Gorka es de los que cree en la libertad de prensa y se ha llevado un ejemplar de ‘500 azal / portadas’, en este caso para regalar. «En mi casa siempre hemos sido lectores de ‘Egin’ y cuando supe que salía decidí que teníamos que comprar uno. Según he entrado, he venido directo a por él», comenta. Se lleva un ejemplar y nos despide con la duda de si volverá a por un segundo. «Este es para regalar a mi suegro, que sé que leva a gustar, pero he dudado en si llevarme otro para casa… por el momento me llevo este», se despide.

Sea para regalar, para conservar una parte de nuestra historia en nuestras librerías –o paredes– o para realizar una labor educativa, merece la pena dedicar unos minutos a ojear el material del stand.