A las 18:00 horas de ayer, una patrulla de Policía Municipal observó que un ciclista circulaba por la acera de la avenida de. Zaragoza, continuando por la calle Zangoza en sentido ascendente, percatándose que lo hacía a una velocidad elevada y sin apenas pedalear.

Al mirar con mayor detenimiento desde una posición más cercana, los policías constataron que el vehículo disponía de batería y la velocidad la controlaba desde un acelerador que había instalado en el manillar, junto a la maneta derecha, sin necesidad de pedalear para desplazarse.

Según añade el citado cuerpo, al parar al conductor, se pudo verificar las sospechas iniciales, ya que se trataba de una bicicleta convencional a la cual su propietario le había añadido un kit que le permitía desplazarse sin necesidad de pedalear, hecho que confirma el policía actuante en el lugar accionando el acelerador, transformando la bicicleta de esta forma en un ciclomotor, el cual necesita para su uso de permiso de circulación.

Al examinar los componentes del kit, se comprobó que constaba de una batería, una rueda trasera de tracción y una centralita con un display que había colocado en el manillar. Además del sistema de aceleración situado junto a la maneta derecha del manillar.

Por todo ello, los policías denunciaron al responsable por circular con un vehículo careciendo de la correspondiente autorización administrativa (sin permiso de circulación).
 
Desde el Grupo de Tráfico de Policía Municipal de Iruñea se advierte sobre las consecuencias que pueden conllevar la compra e instalación de este tipo de kits eléctricos que transforman una bicicleta en un ciclomotor, ya que no se circula con pedaleo asistido sino accionando un acelerador.