La central sindical ESK, que la semana pasada ya se querelló contra la ministra Maroto y la consejera Arantxa Tapia, ha denunciado a Osakidetza ante el Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) por «vulneración del derecho a la vida, a la salud y a la integridad de su plantilla» durante la situación de estado de alarma por el coronavirus, ha informado su dirigente Patxi Nicolau.

Se trata de una demanda de Tutela de Derechos Fundamentales contra Osakidetza, concretamente de «Tutela a la Salud e Integridad de su Plantilla».

Según ESK, tras más de un mes desde que se declararon los primeros casos de coronavirus en la CAV, Osakidetza y el Departamento de Salud que dirige la consejera Nekane Murga «siguen gestionando mal y de forma caótica la distribución de material de protección».

En su denuncia explica que «obligan a la plantilla a reutilizar equipos diseñados para un solo uso, de forma que se ve obligada a prolongar su utilización más allá de las recomendaciones recogidas en los diferentes protocolos».

Además, según censura, los empleados se ven obligados a reutilizar las mascarillas, de manera que se ven obligados a utilizar la misma mascarilla durante más de una semana.

Asimismo, modifican «los protocolos publicados por el Departamento de Salud en función de la disponibilidad de los EPIs, rebajando la protección de los y las trabajadoras por el desabastecimiento de los mismos; mientras la consejera Tapia no duda en asegurar dichos equipamientos a Confebask».

Vuelta sin garantizar el positivo

También critica ESK que Osakidetza obliga a la plantilla a «reincorporase a su puesto de trabajo tras cinco días de resolución de la fiebre y mejoría de los síntomas respiratorios, sin realizar un test que confirme un negativo en coronavirus».

ESK también considera que Osakidetza discrimina a colectivos que prestan su servicio en las diferentes OSIs, al no suministrarles EPIs adecuados, por ejemplo celadoras, personal de limpieza, personal técnico de rayos, etc.

Es por ello que el sindicato reclama al Departamento de Salud «un compromiso inequívoco de que se suministrará a todas las categorías que prestan su servicio en Osakidetza, los EPIs imprescindibles para poder controlar esta pandemia, así como que garantice el suministro para el personal sanitario, incluyendo a las personas que trabajan en las contratas privadas, como personal de limpieza o de transporte sanitario.

Asimismo, siguiendo las directrices de la OMS, ESK «exige la puesta en marcha de los mecanismos necesarios que aumenten el control del contagio, realizando el test a todos los profesionales sociosanitarios».